Abstracts - Nutrición

Los lechones que han sufrido restricción de proteína en edades tempranas pueden presentar crecimiento compensador que no alcanza a reponer la pérdida inicial.

Los resultados sugieren que el tipo de proteína puede condicionar el desarrollo de algunas vísceras digestivas

El producto ensayado mejoró los rendimientos productivos y la salud intestinal de los lechones

Una prueba más de la utilidad de los enzimas (beta-glucanasa, xilanasa y celulasa) para dietas post-destete que incluyen cebada.

Los resultados indican que los prebióticos y probióticos ensayados no ejercieron un efecto promotor del crecimiento significativo

En determinadas circunstancias los extractos de plantas pueden ser tan efectivos como los promotores de crecimiento de tipo antibiótico.

La inclusión de DDGS en la ración hasta un 30% empeoró ligeramente todos los parámetros a estudio.

La adición de avilamicina u óxido de zinc permitió reducir del 35,0 al 17,5% la inclusión de lactorreemplazante en dietas estárter.

La inclusión de probióticos a la dieta no afectó a los rendimientos productivos pero redujo la mortalidad.

El ácido linoleico conjugado mejoró la respuesta inmune y redujo las pérdidas productivas de los lechones tras un desafío con lipopolisacáridos.

La incorporación de cantidades equivalente de PNA solubles ejerció el mismo efecto que los insolubles tanto sobre la ingestión como sobre el tránsito digestivo.

En este experimento el trigo contaminado con otros granos y semillas ofreció rendimientos superiores a la cebada.

El lactobacilo aislado tuvo un comportamiento esperanzador en condiciones “in vitro”.

Una prueba más de que mantener el equilibrio lisina/ED no empeora necesariamente los rendimientos y ofrece beneficios medioambientales.

Los resultados muestran una secuencia de administración de acidificantes que ofrece rendimientos equivalentes al carbadox.

El girasol aumenta la proporción de ácidos poliinsaturados y reduce las de saturados y monoinsaturados de la grasa del jamón.

La excreción de nitrógeno se redujo en más de un 40% y la emisión de amoníaco en más del 60%.

Los resultados muestran un aumento significativo de los nacidos totales y nacidos vivos con un periodo de suplementación mínimo de 35 días.

En este trabajo la recomendación práctica de niveles de lisina digestible real es de 1,00% y 0,95% para pesos vivos de 30 a 44 y de 44 a 67, respectivamente.

Los taninos perjudican seriamente la digestibilidad ileal aparente de los aminoácidos sobretodo la prolina, arginina y glicina.

El nivel máximo de incorporación de lisina sintética compatible con el mejor rendimiento fue de 0,5% en transición y 0,4% al inicio de la fase de crecimiento.

Una prueba más de la efectividad de las fitasas para reducir la excreción de fósforo sin modificar los rendimientos productivos.

Una nueva prueba de que la lisina sintética puede sustituir a la de la soja siempre que se mantenga un adecuado equilibrio entre aminoácidos.

La suplementación con L-carnitina amortiguó el descenso de pH sanguíneo derivado de un stress en el momento de la carga.