Abstracts - Nutrición

Alimentar con arroz en lugar de maíz a los lechones destetados mejora el rendimiento del crecimiento.

La reducción de la PB en la dieta reduce la excreción de N al tiempo que mantiene el rendimiento de los animales y la composición de la canal.

La suplementación con pimienta negra aumentó los niveles de HDL y vitamina C en el perfil del suero en cerdos en crecimiento.

La suplementación con aceite de árbol de té mejora la inmunidad de la mucosa intestinal cuando se usa en lechones destetados.

La suplementación con AA cristalinos permite la reducción a 126 g SID de PB/kg sin afectar el crecimiento de la camada.

La grasa de ave de corral combinada con aceite de linaza y vitamina E en distintos niveles puede usarse como fuente de grasa para cerdos de engorde sin afectar la composición de la canal y calidad de la carne.

El extracto de etanol de semilla de mango podría usarse como un antioxidante natural adecuado para las dietas de cerdos de engorde.

C. utilis puede reemplazar hasta un 40% de PB mantieniendo el crecimiento y mejorando la función digestiva.

La estrategia de alimentación danesa mostró una mejora en el tamaño de la camada y lechones nacidos vivos.

La inclusión de 6% de harina de hoja de moringa modifica positivamente el perfil de ácidos grasos de la carne de cerdo.

La DIE óptima Trp:Lys difiere según el peso corporal de los cerdos y el parámetro medido.

Las tortas de colza prensadas en caliente se pueden usar en dietas de destete pero a bajos niveles de inclusión.

El manejo relacionado con el momento de la alimentación restringida en cerdas gestantes puede mejorar el rendimiento de estas.

La lecitina sola o combinada con L-carnitina produce efectos contrarios en el contenido de PUFAs.

La suplementación dietética con orégano y romero modula la respuesta inmune y mejora el contenido de polifenoles en la carne de cerdo.

El arroz integral podría ser una alternativa adecuada para reemplazar el maíz en las dietas de destete para lechones.

La combinación de vitamina D3 y 25(OH)D3 en las dietas de las cerdas mejora el nivel de la vitamina D tanto en las madres como en sus crías.

Las fuentes alternativas de proteínas, como las microalgas o larvas de insectos, no comprometen los caracteres finales de calidad de la carne de cerdo.

La inclusión de propionato de cromo en la dieta puede beneficiar el rendimiento del crecimiento en cerdos de engorde con estrés por calor.

Las habas pueden ser una fuente de proteínas adecuada para las dietas de destete, con un potencial de hasta un 20% en el nivel de inclusión en dietas para cerdos jóvenes.

La inclusión en la dieta de Pichia guilliermondii durante la gestación puede mejorar la prolificidad al tiempo que reduce la cantidad de lechones con peso corporal bajo al nacimiento.

Las dietas para cerdos han cambiado durante los últimos 20 años y las concentraciones de algunos elementos ahora son menores. La concentración de fósforo ha disminuido en hasta un 36%, de forma concurrente con la adición de fitasas en las dietas. La mayoría de oligoelementos también han disminuido, a excepción del Zn, cuya concentración en los purines se ha duplicado.

Independientemente de la naturaleza de la fuente de Zn utilizada, niveles más elevados de Zn agregado parecen mejorar las características de la canal de cerdo.

Los suplementos dietéticos de clorhidrato de cisteamina en cerdos de acabado pueden promover la estabilidad del color de la carne al reducir la oxidación.