¡Maximiza la calidad del calostro y la respuesta vacunal con beta glucanos: la mejor defensa para tu granja!

Asegurar una inmunidad de primera no solo se trata de combatir enfermedades, sino también de prevenirlas. Ahí es donde entra en juego nuestra arma secreta: los beta glucanos. Al potenciar el sistema inmunológico, los beta glucanos no solo mejoran las respuestas a las vacunas, sino que también fortalecen y ayudan a los animales a responder contra el estrés y la inflamación.

A lo largo de su vida, una cerda recibe varias vacunas, cada una desempeñando un papel crucial en la protección de su salud y aumentando los niveles de inmunoglobulina en el calostro para sus lechones. Aunque algunas vacunas son altamente efectivas, agregar un efecto de 'impulso' puede ser un cambio radical, estabilizando rápidamente las granjas durante los brotes y preparando a los lechones para un futuro resistente.

¿La mejor parte? Incorporar inmunomoduladores como los beta glucanos no solo amplifica una vacuna, sino que potencia todo nuestro programa de vacunación, asegurando la máxima protección para tu granja.

¿Qué son los inmunomoduladores?

Los beta glucanos son potentes inmunomoduladores que ajustan la respuesta inmunitaria del cuerpo, mejorando su capacidad para defenderse contra patógenos mientras regulan la inflamación. Al activar células inmunitarias como los macrófagos y las citoquinas, los beta glucanos aumentan la inmunidad, haciéndolos invaluables para mejorar la eficacia de las vacunas y la salud general en los animales.

Diferentes tipos de inmunomoduladores

Los beta glucanos tienen un historial en la mejora de la inmunidad. Pueden obtenerse de diversas fuentes naturales. Las fuentes comunes incluyen levadura, avena, cebada y algas. ¡Estas fuentes proporcionan diferentes tipos de beta glucanos, no son todos iguales!

Los beta-(1,3)-glucanos lineales son los más efectivos ya que son más reconocibles por los receptores en los macrófagos y las células dendríticas. Los beta-(1,3)-glucanos lineales pueden provenir de algas unicelulares, ahora, no confundamos esto con algas marinas, porque no lo son, son unas algas increíbles que crecen naturalmente en agua dulce.

¿Cómo funcionan?

En esencia, los beta glucanos, una vez ingeridos, interactúan con el receptor Dectin-1 en los macrófagos y las células dendríticas dentro del tejido linfático del intestino. Esta interacción desencadena una cascada de reacciones internas, aumentando finalmente la producción de interleucinas y otras quimiocinas. Estas sustancias facilitan la diferenciación de linfocitos y mejoran la secreción de inmunoglobulinas. Los beta glucanos lineales son la fuente preferida debido a su capacidad de unión superior en comparación con las formas ramificadas, optimizando sus efectos inmunomoduladores. Así, los beta-(1,3)-glucanos lineales provenientes de algas unicelulares son más potentes y efectivos que la versión ramificada proveniente de la levadura. Debido a su composición, es fácil que se unan cuando son lineales.

No confundamos las algas unicelulares con las algas marinas. Las algas unicelulares que crecen en aguas dulces. Las que utilizamos en producción animal  son cultivadas en un laboratorio bajo un entorno específico y controlado producen beta-(1,3)-glucanos que están fácilmente disponibles y con una concentración estandarizada.

¡Suficiente de la ciencia detrás de esto! Saltemos del laboratorio y vayamos a la granja para algunas experiencias de la vida real. Verás esto en el próximo artículo, ¡Estate atento!