Abstracts - Genética y Reproducción

Los lechones nacidos de cerdas que se mostraron más activas el día previo al parto, levantadas y realizando otras actividades distintas a beber y comer, tuvieron mayor tasa de supervivencia.

Este estudio resume los métodos utilizados en granjas y laboratorios de investigación para evaluar la calidad del semen en cerdos.

Existe variación genética en el peso individual de los lechones, las características de la camada y el número de tetas funcionales en cerdos criados en condiciones ecológicas al aire libre.

La cámara LiDAR tiene potencial como herramienta no invasiva para ayudar a identificar el celo de la cerda.

Es posible producir embriones knock-out mediante lipofección de ovocitos porcinos con zona pelúcida intacta con eficiencias similares a las de la electroporación

El peso corporal de los lechones de cerdas de primer parto fue normalmente inferior hasta los 45 días de edad, pero similar o mayor a los 100 y 145 días de edad.

La microbiota presente en las heces, el calostro y las secreciones vaginales de las cerdas colonizan más fácilmente los intestinos de los lechones mediante un efecto simbiótico.

Alcanzar un peso óptimo en la primera cubrición es esencial para maximizar el rendimiento de la cerda a lo largo de su vida.

En el confinamiento a corto plazo de cerdas en parideras durante cinco días alrededor del parto, abrir la jaula de parto por la tarde puede reducir las pérdidas de lechones.

Los cambios fisiológicos en la cerda a medida que se acerca al parto afectan su productividad.

La termografía, junto con los sistemas de inteligencia artificial, puede ayudar a identificar y orientar en el diagnóstico de animales sintomáticos para una actuación temprana adecuada.

Los resultados confirman la eficacia del nuevo sistema de administración vaginal de fármacos para la inducción del parto en cerdas.

En las parideras libres se observó una menor duración del amamantamiento y más amamantamientos finalizados por la cerda en comparación con las jaulas de maternidad.

La abundancia y las estructuras de la comunidad microbiana difieren significativamente entre cerdas con diferentes tamaños de camada y etapas de gestación.

La espermina y la espermidina alivian el estrés oxidativo aumentando así la eficacia de la conservación del semen de verraco.

El estudio evaluó si las vacunas administradas en el útero pueden dar lugar a suficientes anticuerpos calostrales para proteger a los lechones contra el virus de la diarrea endémica porcina.

Los lechones con 1,25 a 2,30 kg de peso al nacimiento y baja ganancia de peso durante la lactación presentaron un crecimiento compensatorio parcial durante la transición.

Se confirman efectos genéticos considerables en la prevalencia del síndrome de inflamación y necrosis porcina en la descendencia bajo una cría determinada.

Las pruebas de estrés del semen no pueden utilizarse como pruebas únicas para predecir la capacidad fertilizante de los eyaculados de verraco.

La aplicación de cloprostenol después del parto mejoró la fertilidad en el ciclo subsiguiente y redujo los días no productivos postparto.

Las cerdas con mayor riesgo de prolapso de órganos pélvicos tienen una microflora vaginal única.

La supervivencia es una característica compleja con baja heredabilidad; sin embargo, todavía se pueden obtener importantes ganancias genéticas, especialmente bajo un marco de predicción genómica.

La zona de confort térmico de las cerdas puede ser más reducida de lo que indican las recomendaciones actuales.

La selección de la respuesta de anticuerpos al PRRSV puede aumentar el tamaño de la camada en cerdas cruzadas y de raza.