El USDA ha publicado un informe que describe cómo la COVID-19 afectó a la industria cárnica porcina de los Estados Unidos. La enfermedad tuvo un efecto negativo en los volúmenes de sacrificio regionales en los primeros meses de la pandemia, pero cada región se recuperó de manera diferente.
Las principales regiones productoras de carne de cerdo, como la región 5 (Illinois, Indiana, Michigan, Minnesota, Ohio y Wisconsin) y la región 7 (Iowa, Kansas, Missouri, y Nebraska) experimentaron descensos entre el 30–40% en el volumen de sacrificio semanal en comparación con el 2019, pero estas caídas sucedieron durante aproximadamente tres semanas al inicio de la pandemia. Ambas regiones se vieron afectadas temporalmente y se recuperaron a pesar de que los casos en la zona continuaron aumentando durante el resto del 2020. Estas regiones produjeron el 73% del total de carne de cerdo procesada en EE. UU.
La regiones con menor producción reaccionaron de maneras diferentes a la pandemia. Por ejemplo, la región 2 (Nueva Jersey y Nueva York) experimentó una gran disminución en el sacrificio, pero, a diferencia de las principales regiones productoras, el impacto persistió durante todo el año: las tasas de sacrificio fueron más bajas que las registradas en 2019. El volumen total de sacrificio en la región 2 representa menos del 1% del volumen total de EE. UU.
En general, en 2020 la mayoría de regiones tuvieron aumentos en el sacrificio total en comparación con 2019, lo que sugiere que la industria sufrió al inicio de la pandemia pero ajustó la producción y se recuperó al menos parcialmente.
El documento también analiza el efecto que podría tener la ubicación de las plantas, las correlaciones entre los casos de COVID-19 y los volúmenes de sacrificio regionales, y el tamaño de la planta.
Puedes acceder al documento completo en inglés aquí: Working Paper- Changes in Regional Hog Slaughter During COVID-19
2 de diciembre de 2021/ USDA/ Estados Unidos.
https://www.ers.usda.gov