Enric Vilalta i Famada. Ingeniero agrónomo. España ()
10-oct-2006 (hace 18 años 1 meses 12 días)En el planteamiento técnico de las líneas de gestión de las
deyecciones ganaderas excedentes, ya sea en el marco de un modelo centralizado
o individual, se contempla habitualmente la aplicación de tecnologías
relacionadas con la biometanización —digestión anaeróbica
metanogénica. Aún así debe reconocerse, a diferencia de otros
países, que la implantación real de estas tecnologías en
el entorno agropecuario español es casi anecdótica.
La percepción de que la digestión anaeróbica exige una
inversión elevada en infraestructuras y que requiere de un control experto,
le han atribuido una cierta fama de tecnología complicada. Esta reputación,
sumada a una política energética no muy alentadora, ha actuado
en gran medida de barrera a su introducción.
Valgan los siguientes puntos para presentar algunas nociones sobre la biometanización.
Bases de la biometanización
Las digestión metanogénica se fundamenta en la actividad microbiana
anaeróbica (sin oxígeno) que degrada la materia orgánica
y que proporciona un producto gaseoso (biogás), el cual está compuesto
principalmente por metano (CH
4, 55 – 75%
v/v) y CO
2
(25 – 45% v/v). El proceso no es simple, y concatena la acción de
diferentes grupos bacterianos complementarios con requerimientos de cultivo diferentes.
Como cualquier otro tratamiento de depuración basado en procesos biológicos,
su buen funcionamiento (en relación a la calidad y cantidad de biogás
obtenido) depende básicamente de las condiciones de operación
del tratamiento (de los cuidados del cultivo) y del substrato utilizado.
Digestión anaeróbica y deyecciones ganaderas
En relación al tratamiento de los purines porcinos y otras deyecciones
ganaderas, la biometanización no debe enfocarse como una tecnología
de depuración a final de línea; esencialmente porque no tiene efecto
alguno en la reducción de los contenidos en nitrógeno (aunque sí
en la distribución de sus formas). Su aplicación debe dirigirse
a lograr un aprovechamiento energético de los purines, alcanzar un cierto
grado de depuración y proporcionar unos materiales finales bioestabilizados
y utilizables agrícolamente:
|
a)
el aprovechamiento del biogás como combustible, ya sea para generar
calor o mediante cogeneración (producción de energía
eléctrica y calor) puede suplir, en un esquema de gestión
centralizada, parte de los gastos energéticos de los tratamientos
de depuración y, dentro de una gestión individual, puede
permitir alcanzar un balance energético positivo.
b) la bioestabilización de los efluentes digeridos
(o mineralización y reducción parcial del su carga orgánica),
junto con un descenso de los malos olores y una cierta homogeneización
y higienización, facilitan su reutilización como fertilizante
agrícolas (o, si es el caso, no dificultan los tratamientos de
depuración posteriores).
c) el efecto de substitución de los combustibles
fósiles, como en cualquier energía renovable, ayuda a la
reducción de las emisiones de CO2;
además de la reducción de emisiones de CH4
y de otros compuestos
orgánicos volátiles de elevado efecto invernadero. |
Diagrama
explicativo de una instalación tipo de biometanización para
deyecciones ganaderas. |
|
ARC,
2004. Adaptada |
|
Instalación
piloto para la determinación de la producción de biogás
de residuos orgánicos. |
Productividad de los purines porcinos
La producción potencial de biogás a partir de purines porcinos varia
en el rango de los 350 - 650 L
bg/kg
SV alimentado (dependiendo del contenido en sólidos, el tipo de digestor
y las condiciones de operación).
Para unas condiciones de operación típicas en régimen mesofílico
(T ≈ 37ºC) y un purín porcino normal (ST ≈ 6 - 8%), puede
indicarse como valor guía una productividad de 450 L
bg/kg
SV (alrededor de 30 L
bg/kg
purín), con una riqueza del biogás próxima al 70% v/v de
contenido en metano.
En estas condiciones puede conseguirse una reducción de la materia orgánica
cercana al 40% en SV y al 60% en DQO.
Codigestión y viabilidad de la biometanización
La no internalización de los beneficios ambientales de la biometanización
en los costes de la explotación ganadera, implica que su rentabilidad
se calcule sólo sobre la base del balance energético. De esta
manera, la producción de biogás en instalaciones que únicamente
tratan purines porcinos resulta habitualmente insuficiente para hacerlas viables.
Las soluciones más evidentes a esta situación pasan por aplicar
tecnologías más simples (y económicas) e incrementar la productividad
de la biometanización. En esta última línea, la codigestión
o tratamiento conjunto de diferentes residuos, es la opción más
factible a aplicar en el entorno agropecuario (la cual funciona en la mayoría
de países europeos; excepto España por el momento). La codigestión
crea sinergias que permiten:
|
a)
incrementar el rendimiento y eficiencia del proceso biológico.
b) centralizar en una sola instalación el tratamiento
de residuos agrícolas y agroalimentarios (sin excluir los residuos
sólidos y admitiendo el uso de substratos de alta productividad
que por si solos no son digeribles).
c) facilitar
la confección de mezclas que resulten en efluentes reutilizables
agrícolamente y con contenidos en fitonutrientes plenamente equilibrados. |
Valores
indicativos de poductividad de biogás |
Residuo/sustrato
|
Produtividad
biogás
(Lbg/kg
SV) |
Purín
porcino (engorde)
|
450
- 550 |
Estiércol
bovino (engorde)
|
300 - 350 |
Gallinaza
|
350
- 450 |
Ensilado (forraje)
|
500
- 600 |
Lodos depuración
|
200
- 300 |
FORM
|
200
- 500 |
Residuos alimentarios
|
400
- 600 |
Lodos separación
grasas |
>1000 |
|