La modificación de la población bacteriana en cerdos mediante el consumo de quitosano provoca un aumento de las emisiones de olor en el purín

Estudios previos han apuntado que reducir el nivel de PB de la ración puede mejorar la utilización del N y así reducir las emisiones de amonio de los purines. Sin embargo, la respuesta de las emisiones a tales modificaciones en la ración ha resultado ser inconsistente. Investigaciones previas han demostrado una disminución en la emisión de olores en respuesta al consumo de hidratos de carbono fermentables, lo que en parte se atribuye a la promoción de las bacterias ácido-lácticas. Por lo tanto, el objetivo del presente estudio fue inducir una disminución de los recuentos de lactobacilos (DL) a nivel del tracto gastrointestinal distal (TGId; ciego + colon) en cerdos de acabado a los que se les ofreció raciones tanto con alto como con bajo contenido en PB mediante el consumo de quitosano, y examinar la influencia de este modelo en las emisiones de amonio y olor en comparación con una ración control positivo. Se llevó a cabo un diseño factorial de 2 x 2 para investigar el efecto de incluir quitosano [0 (control positivo) vs. 20 g/kg de pienso] y alta o baja concentración de PB en la ración (200 vs. 150 g/kg de pienso) sobre la digestibilidad de los nutrientes, la utilización del N, las poblaciones de bacterias seleccionadas y la composición en metabolitos del TGId, y las emisiones de los purines procedentes de cerdos de acabado (60,3 kg).

El consumo de quitosano no tuvo influencia (P < 0,05) ni sobre la digestibilidad de los nutrientes ni sobre la utilización del N. Tanto en las raciones con alto como con bajo contenido en PB, el consumo de quitosano provocó una disminución del cociente entre lactobacilos y Enterobacterias (P < 0,01), dando lugar a una población DL y a un aumento del pH (P < 0,01) en el TGId y de la concentración de amoníaco (P = 0,02) en el ciego, en comparación con las raciones que mantuvieron una población normal de lactobacilos. El consumo de quitosano provocó una disminución de las proporciones molares del ácido butírico (P < 0,01) y un aumento de las del ácido valérico (P < 0,01) a nivel del TGId, en comparación con las raciones sin suplementar. Además, el consumo de quitosano aumentó las emisiones de olor de los purines (P = 0,05) en comparación con las raciones sin suplementar. En cambio, el consumo de quitosano no tuvo efecto (P > 0,05) sobre las emisiones de amoníaco de los purines desde las 0 hasta las 240 h.

El presente estudio demuestra que la adición de quitosano en la ración suprime las poblaciones de lactobacilos en el TGId. En respuesta, se observa un aumento considerable del recuento de las Enterobacterias, de los marcadores de la fermentación proteica y de las emisiones de olor de los purines, en comparación con la ración control positivo. Estos efectos se observaron tanto en los cerdos que recibieron la ración con bajo como con alto contenido en PB. El presente estudio indica el posible papel que pueden ejercer las bacterias ácido-lácticas a la hora de modular las emisiones de olor de los purines, relativamente independiente de las proporciones de PB disponibles para la fermentación a nivel del TGId.