Nutrición y estrés en porcino

Así lo ve Imasde

24-abr-2006 (hace 18 años 6 meses 30 días)
Los requerimientos nutricionales de los cerdos dependen de factores como la genética, ambiente, sanidad y bienestar. Se han estudiado ampliamente las necesidades en nutrientes según el peso, edad, sexo, potencial de deposición magra y condiciones ambientales, pudiéndose establecer recomendaciones con bastante precisión al considerar todos estos factores. Sin embargo, aun es escaso el conocimiento de cómo influyen los distintos estados de estrés (sanidad, bienestar, ambiental, etc) sobre los requerimientos nutricionales, y como la nutrición puede atenuar sus efectos perjudiciales sobre el consumo de alimento, crecimiento, deposición magra y bienestar del animal.

Las necesidades en nutrientes del cerdo pueden establecerse según distintos criterios de respuesta:

• Ausencia de signos clínicos de deficiencia.

• Resultados productivos.

• Actividad metabólica.

• Respuesta inmune.

En general, las recomendaciones publicadas por los distintos centros de investigación suelen cubrir los dos o tres primeros criterios como parámetro de optimización. Desde un punto de vista comercial la suplementación óptima será la que nos proporcione un máximo rendimiento económico (buenos crecimientos, conversiones y estado inmunitario a mínimo coste por unidad de producto final), siendo habitual el uso de niveles superiores, al considerarse ciertos márgenes de seguridad y con el ánimo de cubrir las necesidades de una respuesta inmune bajo las condiciones típicas de explotación.

Vitaminas

• Vitaminas antioxidantes (E y C): en estrés inmunitario, o situaciones de estrés que puedan afectar la calidad de la carne antes del sacrificio.

— La vitamina C actúa en sinergia con la E (protección y ahorro de la misma). Su síntesis endógena es suficiente en condiciones normales. También se sugieren efectos beneficiosos en situaciones de estrés térmico. Altamente oxidable y termolábil, pudiendo ser necesario el uso de formas protegidas.

• Vitaminas del grupo B: diferentes estudios han mostrado mejoras productivas al incrementar su suplementación en condiciones de estrés inmunitario.

Minerales

• Magnesio: se han descrito efectos beneficiosos en la reducción de los perjuicios sobre la calidad de la carne (PSE) del estrés previo al sacrificio. Ciertos trabajos sugieren la ventaja del uso de formas orgánicas de este mineral

• Equilibrio electrolítico (Na+K-Cl):

— En situaciones de estrés térmico puede ser interesante aumentarlo con el uso de bicarbonato (250-500 meq).

— Suele aumentarse la inclusión de sal en el pienso en las situaciones de agresividad. En estos casos, también se sugiere aumentar el nivel de proteína (triptófano) y usar piensos en harina con molturaciones groseras.

• Fósforo: sobretodo si se produce una disminución importante del consumo.

Aminoácidos

La exposición a antígenos infecciosos o no-infecciosos estimula el sistema inmune con la liberación de citoquinas proinflamatorias las cuales inducen cambios metabólicos de mayor magnitud como la hiperemia, anorexia, catabolismo de la proteína muscular y aumento de la síntesis hepática de proteína (p.e. proteínas fase aguda, PFA). En consecuencia, ciertos nutrientes se desviaran del crecimiento a los tejidos y células involucradas en la respuesta inmune e inflamatoria.

• Fuente de energía (p.e. Glu, Ser, Gly) y proteína para la proliferación celular.

• Sustrato para la síntesis de inmunoglobulinas y proteínas inflamatorias (p.e. Phe, Try, Tyr, Thr, Cys)

• Intervenir en rutas metabólicas específicas relacionadas con la respuesta inmune.

La modificación de los requerimientos en AA en las situaciones de estrés será tanto cuantitativa como cualitativa (perfil de proteína ideal), pudiéndose considerar como esenciales ciertos AA que en condiciones normales son sintetizados por el cerdo en suficiente cantidad. Aparte de la respuesta inmune también se han descrito otras situaciones de estrés con implicaciones de ciertos AA:

• Glutamina: como fuente de energía y promoción del desarrollo de la mucosa intestinal en lechones destetados.

• Triptófano: como precursor de la síntesis de la serotonina en el SNC, aumentado el consumo de alimento y mayor sosiego del animal (agresividad lechones, estrés del trasporte).

Aditivos

Existen una amplia gama de aditivos disponibles actualmente en el mercado con efectos sobre la salud del animal, los cuales según distintos mecanismos de acción pueden tener efectos beneficiosos en diferentes situaciones de estrés.

Dieta

El estrés producirá una disminución del consumo de pienso, por lo que deberán formularse dietas más nobles, en aspectos como: apetecibilidad, digestibilidad, higiene, ausencia de factores antinutricionales, presentación, etc.

(En el caso de piensos medicados o con determinados aditivos, debe ajustarse la dosis según el consumo real y peso vivo de los animales)

Conclusiones

• Las situaciones de estrés variaran los requerimientos nutricionales de los animales y ciertas medidas nutricionales pueden paliar sus efectos.

• El estrés puede ser debido a muy diversos factores (sanidad, ambiente, manejo, etc.), variando las medidas a tomar según el tipo y objetivos a conseguir.

• Como regla general debemos procurar dietas más nobles (apetecibles, digestibles) y con niveles superiores de nutrientes claves (vitaminas, minerales, aminoácidos, aditivos).