Caso clínico: Intoxicación por warfarina

01-dic-2000 (hace 23 años 11 meses 21 días)

Descripción de la granja

Se trata de una granja de unas 200 cerdas de ciclo cerrado aunque no se engordan en ella todos los cerdos producidos.

Cada semana se visita la granja y se hace un repaso de la producción y de las pautas sanitarias, a la vez que se lleva a cabo el control reproductivo.

Aparición del caso

Después de la aparición de tres bajas del mismo corral en una de las naves de engorde con un total de 100 animales, el encargado decide avisar al veterinario explicándole lo sucedido y comentándole que a simple vista no aprecia ningún síntoma evidente en el resto de animales.

Visita a la explotación

La visita se inicia por la nave donde han aparecido las bajas. En esta nave inicialmente habían 100 animales de unos 30 kg PV distribuidos en ocho corrales, con un pasillo central.

Todas las bajas son del último corral, situado a la izquierda y debajo de la ventana. Los síntomas que se observan en estos animales son:

En el corral contiguo se observa también diarrea de color chocolate y debilidad, pero los animales no van cojos.

Los animales restantes no presentan ningún síntoma, tienen un buen aspecto en general y una buena vitalidad.

Los otros animales de engorde y destetes se encuentran en buenas condiciones, igual que las cerdas.

Hemorragias subcutáneas

Se necropsian los animales muertos y en las tres bajas se observan las mismas lesiones:

Necropsia

Tratamiento

El veterinario sospecha de una intoxicación y decide administrar 3cc de vitamina K intramuscular durante 3 días a todos los cerdos del corral más afectado y a los animales del corral contiguo donde se ha observado la diarrea. El tratamiento continuará con una dosis de 2cc vit K durante 8 días más.

Evolución del caso (Día 1)

Al día siguiente se muere un cerdo de un corral diferente, situado justo delante del corral donde se dieron las tres bajas anteriores. Se realiza una necropsia y se observan las mismas lesiones que se encontraron en las necropsias realizadas el día anterior.

Después de esta muerte en un corral diferente el veterinario decide instaurar el tratamiento con vit. K en toda la nave a dosis terapéutica también durante 3 días, para continuar con el tratamiento de recuerdo, ya que transcurre un tiempo antes no se reactivan todos los factores. Evolución del caso (Día 2)

Al cabo de dos días del inicio de las muertes aparece un nuevo animal muerto de otro corral en el que se observan las mismas lesiones que en los anteriores casos.

Los cerdos del corral donde se presentaron las primeras muertes evolucionan bien, no van tan cojos, baja la inflamación de las articulaciones y disminuye la diarrea. Los otros animales de la nave no presentan ningún síntoma externo, pero se observan heces ligeramenbte sanguinolentas.

Se continua con el tratamiento.

Evolución del caso (Días 3, 4 y 5)

Durante los días siguientes y aunque los animales parece que se encuentran bien, se hallan tres bajas más, a la primera no se le realiza necropsia, la segunda presenta lesiones de enteritis aguda y la tercera presenta lesiones hemorrágicas.

A partir del sexto día ya no se presenta ninguna muerte más y los animales evolucionan satisfactóriamente.

El veterinario estaba en lo cierto, se trata de una intoxicación por warfarina, rodenticida de propiedades anticoagulantes presente en los productos utilizados en las desratizaciones.

El tratamiento se lleva a cabo hasta el final.

Comentarios

En este caso clínico que nos ocupa, los cerdos se intoxicaron con warfarina, rodenticida de propiedades anticoagulantes presente en los productos utilizados en las desratizaciones.

Las warfarinas actúan activando los factores de la coagulación dependientes de la vitamina K (II, VII, IX, X), los gastan e impiden la síntesis de nuevos factores en el hígado, provocando un cuadro hemorrágico general. El efecto siempre se produce de 1 a 3 días después de la ingesta del tóxico anticoagulante.

La granja en cuestión siempre padecía de una gran presencia de ratas en las naves, sobretodo en las de engorde y destete, aunque regularmente un equipo especializado de desratización iba a la granja para hacer el control.

Poco antes de la aparición del caso se pidió a la empresa encargada de la desratización un tratamiento fuerte y eficaz contra las ratas. La semana antes a la intoxicación se llevó a cabo el tratamiento de desratización en todas las naves de engorde y destete. En la nave donde posteriormente apareció el problema, los cerdos se encontraban todos distribuidos a un lado de la nave, en la otra, vacía, se dejó veneno en el suelo y entre los comederos. Esa misma semana se dejaron cebos protegidos de veneno en el suelo y en el lado vacío de la nave. Poco después se retiraron los cebos y el veneno del suelo, se limpió la parte vacía de la nave y se redistribuyeron de nuevo los animales. Se dejó veneno entre los comederos como se hace habitualmente y de forma experimental se dejó un cubo lleno de veneno dentro de un comedero, justo en el corral donde luego aparecieron los primeros animales muertos.

El encargado de la granja pidió un tratamiento eficaz contra las ratas, ya que la presencia de estas durante las épocas de calor es alarmante, pero se corrieron riesgos dejando veneno en una nave donde había cerdos. No se sabe si los animales ingirieron directamente el veneno (mezclado con el pienso o del suelo) o si jugaron y comieron algunas ratas envenenadas. Cuando el veterinario llegó a la granja había grandes cantidades de veneno en los pasillos, seguramente las ratas lo habían hecho salir.

El goteo de bajas pudo ser debido a que el efecto anticoagulante de la warfarina es retardado y según el grado de intoxicación el proceso puede ser sobreagudo o subagudo.

Actualmente se llevan a cabo tratamientos rodenticidas regulares en la granja pero con más cuidado y más precisos, por ejemplo actuando entre el techo y el falso techo donde las ratas criaban. Con este sistema parece ser que su número se ha visto reducido.