Escriben N. Canibe, L.L. Mikkelsen y B.B. Jensen nuria.canibe@agrsci.dk
21-oct-2004 (hace 20 años 26 días)La prohibición del uso de muchos antibióticos promotores del crecimiento para
cerdos en la Unión Europea ha dado lugar a una búsqueda intensa de estrategias
alimenticias alternativas a los antibióticos durante los últimos años.
Entre otras estrategias, la alimentación con alimento líquido fermentado (ALF)
ha sido investigada y ha dado resultados prometedores. La ingesta de ALF reduce
el número de varios microorganismos patógenos como
Salmonella, Brachyspira
hyodysenteriae y
Lawsonia intracellularis en el tracto digestivo
de cerdos.
Otros posibles beneficios mencionados en la literatura para considerar el uso
del ALF en alimentación porcina son:
- Mejora de la salud de los animales debido a la reducción de polvo en el
aire (reducción de enfermedades respiratorias).
- Mejora en el mantenimiento de una ingesta de agua y alimento alta y regular
en el post-destete; incremento de la flexibilidad a la hora de elegir materias
primas (materias primas más baratas).
- Mejora del manejo de los materiales (el sistema actúa como mezcladora y
distribuidora del alimento)
- Mayor precisión en la distribución del alimento.
- Mejora en la disponibilidad de fósforo.
Características del alimento líquido fermentado
Trabajar con ALF es trabajar con un "organismo vivo" que no es estable y que
necesita ser controlado para obtener resultados óptimos. Algunos de los motivos
por los que se obtienen resultados negativos en la elaboración de ALF pueden
ser:
- Baja temperatura en el tanque,
- turn-over demasiado rápido (insuficiente residuo en el tanque / insuficiente
tiempo para que la fermentación ocurra)
- y adición de ciertos antibióticos al tanque.
Por lo tanto, para obtener ALF de buena calidad y así hacer uso de su potencial
es crucial entender el curso de la fermentación. La Figura 1 muestra la importancia
de llegar a "steady state" en el proceso de fermentación. Durante las primeras
horas de la fermentación, el número de bacterias del ácido láctico aumenta,
pero al mismo tiempo hay un aumento del número de enterobacterias. Tras aproximadamente
tres días, el aumento de las bacterias del ácido láctico y de la concentración
de ácido láctico coinciden con un descenso del pH y del número de enterobacterias.
Una forma de evitar este aumento de coliformes en el ALF es la adición de ácido
fórmico (0.2%).
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Figura
1. Densidad de microorganismos, pH y concentración de ácido láctico en el
alimento líquido durante la fermentación. |
La composición química del ALF comparado con el alimento seco revela una reducción
drástica del contenido de azúcares de bajo peso molecular y también una reducción
del contenido de lisina libre durante el curso de la fermentación. Una estrategia
para evitar la fermentación de lisina es fermentar sólo los cereales de la mezcla
y añadir el resto de los ingredientes, incluyendo los amino ácidos sintéticos,
al ofrecer el alimento a los animales.
Efecto sobre la ecología gastrointestinal y parámetros productivos
El pH bajo y las altas concentraciones de ácidos orgánicos, especialmente en
el estómago, son características consideradas beneficiosas porque inhiben el
crecimiento de enterobacterias, como coliformes y
Salmonella, en el tracto
digestivo de los cerdos. La alimentación con ALF reduce el pH gástrico comparado
con la alimentación con alimento seco o con alimento líquido no fermentado (ALNF),
lo que se debe a la alta concentración de ácido láctico en el estómago de los
animales alimentados con ALF. Una característica importante observada en los
cerdos alimentados con ALF es la reducción del número de coliformes, aunque
no siempre estadísticamente significativa, comparado con ALNF y con alimento
seco, lo que ayuda a disminuir el riesgo de diarrea. Por otra parte, y dado
que se ha observado una alta correlación entre el número de coliformes y el
de
Salmonella, la alimentación con ALF contribuye a la reducción de
Salmonella
en el tracto digestivo, lo que a su vez contribuye a la reducción de salmonelosis
en personas debido a la ingestión de carne de cerdo. Otras bacterias del tracto
digestivo de cerdos que pueden ser reducidas con la alimentación con ALF son
Brachyspira hyodisenteriae, causante de disentería porcina y
Lawsonia
intracellularis, causante de enteritis proliferativa porcina.
La alimentación de lechones con ALF comparado con alimento seco ha resultado
en una mayor ingestión del alimento y mayor crecimiento diario. Por otra parte,
otros estudios han revelado mejores parámetros productivos en lechones alimentados
con ALNF que en los alimentados con ALF o alimento seco. La desaparición de
lisina debido a la fermentación microbiana en el ALF y una fermentación excesiva,
que puede contribuir a empeorar la palatabilidad del ALF, son posibles causas
de los resultados. Por otra parte, un reciente estudio realizado en nuestro
instituto en el que lechones recibieron ALF desde el destete reveló que los
lechones alimentados con ALF ingirieron menos y crecieron menos que los alimentados
con alimento seco durante las 6 semanas tras el destete. Hay que tener en cuenta,
sin embargo, que los lechones alimentados con alimento seco lo recibieron ad
libitum, mientras que los que recibieron ALF lo hicieron "semi
ad libitum" (ya
que ad libitum puede dar problemas de fermentación excesiva en el comedero).
Hay pocos datos sobre el efecto de ALF sobre parámetros productivos en cerdos
en crecimiento y los resultados no son consistentes. En nuestro instituto hemos
observado menor ingestión y crecimiento y un índice de conversión similar en
cerdos alimentados con ALF comparado con los alimentados con ALNF o alimento
seco.
En conclusión, la alimentación de cerdos con ALF es una alternativa apropiada
para mejorar la salud intestinal de los animales, sin embargo el efecto sobre
los parámetros productivos es variable y se hace necesaria una mayor investigación
en este campo para mejorar la calidad y la estabilidad del ALF, incluyendo la
palatabilidad y el valor nurtritivo.