El uso de los antibióticos tanto en medicina humana como en veterinaria está en el punto de mira por la amenaza que supone la aparición y desarrollo de las resistencias. La Unión Europea ha afrontado el reto con una estrategia propia, cuyos "frutos" comienzan a ver la luz. ¿Qué va a ocurrir con los antibióticos en la Unión Europea? Intentemos dar un repaso a la situación actual y lo que nos viene.
Normativa en desarrollo
Actualmente, se está revisando la normativa comunitaria sobre medicamentos veterinarios y piensos medicamentosos. La propuesta para la regulación de los medicamentos veterinarios se está trabajando desde el 2014. Paralelamente se está revisando la propuesta normativa para modificar el Reglamento de piensos medicamentosos que afectará su fabricación, puesta en el mercado y uso.
Las resistencias a los antimicrobianos (RAM) es globalmente, un serio problema. El uso irresponsable en medicina humana y veterinaria puede contribuir al desarrollo de RAM. Estas nuevas propuestas normativas derivan de la estrategia de la Comisión para luchar contra esta amenaza y son de mucha actualidad las medidas para controlar este problema. Este debate confirma la necesidad de disponer de un criterio científico claro para poder establecer medidas realistas y efectivas.
Respecto a la normativa de medicamentos veterinarios, el debate se centra en:
En piensos medicamentos, los puntos principales del debate son:
Control del consumo de antibióticos
Uno de los principales asuntos es el excesivo uso de antibióticos. Para monitorizarlo, anualmente se realiza un informe, de participación voluntaria, que recoge el volumen de ventas de antimicrobianos en la UE: es el informe ESVAC con datos de 2010 (19 países), 2011 (25 países), 2012 (26 países), 2013 (26 países) y 2014 (29 países).
La evolución en España de ventas totales en tonelada de principio activo y mg/PCU se muestra en las siguientes gráficas.
Las ventas totales de antimicrobianos en España en 2014 representan el 32,9% del total de ventas de antimicrobianos en los países incluidos en el informe ESVAC.
Respecto al consumo por unidad PCU, España en 2014 alcanzó la cifra de 418 mg/PCU frente a la media de los países incluidos en el informe ESVAC que es de 107,84 mg/PCU.
La unidad mg/PCU es un sistema para poder hacer comparable la utilización de antimicrobianos entre países, puesto que compara los mg de principio activo vendidos para el mercado interno de ese país con las unidades de producto animal producido. En el caso de porcino, la PCU (Population Correction Unit) se obtiene del sumatorio del censo medio de reproductoras y de animales producidos para sacrificio, estimando un peso medio de 240 y 65 kg respectivamente. A estos datos hay que restarle o sumarle, la importación y/o exportación de lechones y/o cerdos para sacrificio.
Desde ANPROGAPOR conjuntamente con INTERPORC se está desarrollando un simulador para facilitar el cálculo de los mg/PCU durante un tiempo determinado en cualquier granja de porcino de España. La herramienta será anónima y gratuita y servirá para que cada ganadero o veterinario conozca la cantidad de principio activo consumido de acuerdo con su producción y se podrá comparar con otras granjas del mismo tipo y de tamaño similar.
Revisión normativa actual
La legislación de la UE sobre medicamentos veterinarios, incluyendo antibióticos, tiene por objeto garantizar un alto nivel de protección de la salud, promoviendo el funcionamiento del mercado interior y ayudando a fomentar la innovación. Las más importantes son:
Conclusión
La lucha contra las resistencias a antimicrobianos ha puesto en el punto de mira el consumo de antibióticos en particular y de antimicrobianos en general. Conforme a la estrategia de la Comisión Europea para luchar contra las resistencias, se van a modificar las normativas de medicamentos veterinario y piensos medicamentosos. El objetivo es apostar por un uso responsable de los antibióticos con un doble fin: reducir, si es posible, las resistencias a los antimicrobianos y por otro, disponer de antibióticos efectivos durante mucho tiempo. Los antibióticos son y serán necesarios, por lo tanto hay que hacer un esfuerzo por preservarlos.