Cuando la paridera es pequeña, inventamos un nido

Telma Vieira Tucci
19-oct-2015 (hace 9 años 1 meses 2 días)

Objetivo

Este truco consiste en crear un nido utilizando el pasillo posterior de las jaulas.

 

Descripción

Con el creciente número de lechones nacidos por camada, es fundamental proporcionar un ambiente adecuado al nacimiento y durante la lactancia. La recuperación de la temperatura tras el parto y la presencia de un microclima adecuado para los lechones, diferente del de las cerdas, es imprescindible para un buen rendimiento en esta fase.

Nidos en el pasillo

En este caso, vamos a utilizar el pasillo de detrás de las cerdas en la sala de partos (si existe) para la creación de la zona de nidos móviles. Se construye un contenedor rectangular de 60 x 90 x 40 con un armazón de hierro y las paredes de PVC o DM. No es necesario cubrir la parte inferior, ya que el propio suelo servirá como soporte para materiales como el aserrín, tiras de papel, alfombras de goma, paja, etc. Uno de los lados más largos tendrá una abertura de 40 cm que coincidirá con la entrada de la jaula del parto, que se hace del mismo tamaño, para permitir el acceso de los lechones.

El nido se incorpora en la partición posterior de la jaula, en este caso concreto en el que las jaulas están dispuestas en diagonal, en la parte que no coincide con la abertura trasera de la cerda. La lámpara debe cambiarse de su lugar habitual (junto a la cerda en este caso) al nido, para completar el microclima que hemos creado.