3 de mayo de 2013
14-may-2013 (hace 11 años 6 meses 1 días)Ceres, la diosa de la mitología romana, parece que se ha apiadado de nosotros. Aparentemente nos favorecerá con una buena (incluso buenísima) cosecha de cereales, tanto a nosotros en particular como a toda la zona del Mediterráneo (también el Norte de África), la zona del mar negro y el resto de Europa. Por lo menos, en lo que a producciones se refiere, aparentemente habrá buenas cosechas. Digo “aparentemente”, aunque bien podríamos utilizar “presuntamente” (palabra tristemente célebre últimamente), ya que hay algunos agoreros que alertan de posibles calores durante los meses de mayo y junio, e incluso temen posibles heladas en el Duero y otros advierten de la posible aparición de enfermedades fúngicas debido al exceso de agua. A pesar de estos sombríos pronósticos lo que si se puede casi asegurar es que la cosecha en España será significativamente mejor que la de la última campaña de cereales. Incluso podemos afirmar que la cosecha de maíz está casi garantizada, tendríamos que retroceder bastantes años para ver que, como éste, la totalidad de los pantanos están llenos o casi llenos.
Pocas veces cuento con tan buenas noticias para empezar un artículo, así que hoy las he aprovechado y me he regodeado en ellas, por eso les pido perdón si me he explayado un poco y ahora centrémonos en el mercado. Hace ya semanas que estamos en primavera, y eso aparte de la explosión de la naturaleza, también exige decir que estamos en pleno Weather Market, periodo que durará hasta nueva cosecha (no la nuestra, sino la del Hemisferio Norte en general que es en julio/agosto). El weather market conlleva movimientos bruscos en el mercado al vaivén de noticias alcistas o bajistas dependiendo de las gotas que caigan, las temperaturas que afectan a las zonas productoras... Por eso, y para evitar problemas coronarios, no soy muy partidario de seguir todas las noticias que salen minuto a minuto, sólo no hay que perder de vista las más significativas.
En cuanto al mercado, después del famosos informe del USDA, la verdad sea dicha es que todas las noticias que se han ido publicando han sido bajistas para la vieja cosecha, hemos ido mejorando los stocks finales de campaña, por lo que las ganas de vender han sido superiores a las ganas de comprar. Si a ello añadimos que han seguido llegando barcos de maíz y de trigo, el panorama no pinta mal para los compradores. Los precios se han situado alrededor de 225 €/Tm para el maíz para posiciones inmediatas (aunque llegó a cotizarse a 222 €/Tm). El trigo ha cedido un poco y se llegó a cotizar a 248 €/Tm, situándose ahora alrededor de 253 €/Tm dependiendo de los meses de entrega. La cebada lógicamente es la que menos cede, se cotiza a 242-244 €/Tm dependiendo del destino. No debemos olvidar el sorgo, que aunque en pequeñas cantidades sigue cotizando a 242 €/Tm. Resumiendo no está nada mal para encarar la nueva cosecha. Entiendo que los precios seguirán en estos niveles más o menos, dependiendo del dólar y del empalme de cosecha (hablan de retrasos de 10-15 días), aunque aún es pronto para saberlo.
En cuanto a la nueva cosecha las cosas no han cambiado demasiado si exceptuamos el maíz. Los precios de la cebada han cedido un poco, se hablan de contratos a 205-207 €/Tm destino para junio/agosto. El precio del trigo para nueva cosecha se ha situado en 215 €/Tm para una posición de agosto a diciembre 2012. El maíz sigue cotizando a 195 €/Tm para posición noviembre 2012 /enero 2013, aunque se llegó a cotizar a 189-190 €/Tm.
Y ¿por qué? Si las previsiones de las cosechas son excelentes, ¿por qué los precios del trigo o la cebada no se deciden a bajar? Una palabra lo define todo: el miedo. Miedo a que cualquier nimiedad provoque un cambio en el panorama, miedo a vender de los originadores antes de ver que tienen garantizada la cosecha, en resumen, el miedo refuerza las pantallas. Para no equivocarse se actúa día a día, esperando que sea otro el que mueva ficha primero. Aunque creo que o bien subimos el maíz, la cebada y la soja, o bien debemos esperar que el trigo ceda un poco y busque su espacio de consumo.
En cuanto a la proteína, como me he hartado de comentar, no cede (o cede poco). La nueva y excelente cosecha de Brasil sigue en los puertos y aún no ha llegado a los consumidores. Esto es el motivo fundamental por el que los precios se resisten, que nadie se extrañe si esta situación se alarga en el tiempo, hasta junio o julio. No olvidemos que a nivel mundial las coberturas son cortas y eso siempre favorece la especulación.