La gran paradoja del bienestar

Josep Casanovas
08-abr-2011 (hace 13 años 7 meses 14 días)

Por Japón, por todos los japoneses en general y en particular por los 50, 75 ó 100 voluntarios que han hecho todo lo posible por intentar evitar un desastre nuclear.

A la gente que trabajamos con animales siempre nos ha preocupado su bienestar. Los animales si no están bien no producen.

A la mayoría del resto de la gente, el bienestar de los animales les ha empezado a preocupar cuando el suyo ya hacía tiempo que estaba asegurado.

En diversos países de Oriente Medio y Próximo se están sucediendo toda una serie de movilizaciones populares, con más o menos éxito, reprimidas con más o menos violencia por parte de los gobiernos establecidos, más o menos apoyadas por la sociedad bienestante mundial, eso que antes se llamaba el Primer Mundo.

Parece que las nuevas tecnologías de comunicación han tenido un papel fundamental en el resultado de estas revoluciones, acelerando un proceso que de otra manera habría durado años y que difícilmente habría podido conseguir el efecto de contagio entre los diferentes países.



Lo que ha motivado que estas revueltas se llevaran a cabo ha sido intentar conseguir mejores condiciones de vida, es decir, mejoras en cuanto a BIENESTAR.

Los países bienestantes han respondido de manera distinta a cada una de estas movilizaciones, dependiendo básicamente de sus intereses económicos.

Curiosamente los países que más han estado trabajando para mejorar el bienestar animal en las granjas, y que lo han hecho pensando en que en el momento de diseñar las explotaciones no se podía pensar sólo en criterios económicos, han cambiado de criterio cuando se trata de personas.



Falta muy poco para que todos los cerdos de la Unión Europea se críen y produzcan bajo las normas de la ley de Bienestar Animal (RD 1135/2002). Podemos pensar que en 2013, momento en que acaba el plazo para adaptar las granjas más antiguas a la nueva normativa, será un momento culminante en cuanto a Bienestar Animal se refiere.

Es probable que este momento culminante en cuanto a bienestar animal coincida con el peor momento para el bienestar de la sociedad de la mayoría de países occidentales.

La grave crisis mundial que ha comprometido la situación económica de la mayoría de la población de los países más desarrollados hace que la Sociedad del Bienestar muy probablemente tenga que renunciar, en todo o en parte, a toda una serie de derechos adquiridos, siendo necesario aplicar políticas sociales mucho más restrictivas.

¿será posible mantener una prestación económica para todos los desempleados?
¿será posible una sanidad pública totalmente gratuita, tal como actualmente la conocemos?
¿será posible tener una jubilación relativamente digna?

Esta situación de crisis actualmente se ve agravada por la serie de catástrofes ocurridas en Japón, la tercera potencia económica mundial, y que repercutirán sobre el mundo entero.


El País, miércoles 16 de Marzo 2011

Vivimos en un mundo finito, por lo que sus recursos también son finitos. Cada vez más gente quiere disfrutar de estos recursos.

La población más bienestante del planeta está perdiendo este estatus a un ritmo acelerado, mientras que la parte más oprimida está luchando por mejorar su situación. La tendencia en un mundo global es que ambas situaciones se igualen, y esto puede ocurrir más rápido de lo que pueda parecer.

La situación crítica de la central de Fukushima, en Japón, ha supuesto un cambio radical en la política energética de buena parte del mundo. En un momento en que muchos países pensaban en la solución a los problemas energéticos y económicos podía pasar por utilizar la energía nuclear, la situación crítica de la central nuclear japonesa parece que ha cerrado esa puerta de golpe.

Siendo que parece seguro que la Sociedad del Bienestar va a tener que cambiar, y no a mejor.

Siendo que los logros de la Sociedad del Bienestar son los que han propiciado cambios en el Bienestar Animal.

¿Qué va a pasar con el Bienestar Animal cuando se recorte el Bienestar Social? ¿Es seguro que se aplicará la nueva normativa de Bienestar? ¿Habrá moratoria? Como tantas cosas probablemente depende de lo que se decida en Alemania.

Para terminar apuntar otras cosas que han pasado y que además son motivo de alegría:

Se ha celebrado la FIMA y ha sido un éxito. Ha sido una FIMA reivindicativa y animada. No sé cuantos tratos se habrán cerrado en Zaragoza entre el 15 y el 18 de marzo, pero en esta ocasión muchísima gente acudió a la feria y daba la sensación de que todos los asistentes querían demostrar que, a pesar de todo, este sector nuestro aun está vivo.

El 22 de marzo un importante laboratorio organizó una jornada técnica exclusiva para mujeres veterinarias. El objetivo era hacer un reconocimiento a este colectivo en el año mundial de la veterinaria. Por razones obvias no pude asistir, pienso que la nutrida presencia de compañeras veterinarias en este sector es una demostración más de lo evolucionado que está.

Por fin el mercado de las materias primas se ha movido a la baja, aunque la tendencia se ha visto alterada por la situación de Japón.