Las cojeras en cerdas gestantes alteran la respuesta de la placenta al estrés

Parada Sarmiento M, Lanzoni L, Sabei L, Chincarini M, Palme R, Zanella AJ, Vignola G. Lameness in Pregnant Sows Alters Placental Stress Response. Animals. 2023; 13(11): 1722. https://doi.org/10.3390/ani13111722

29-ago-2023 (hace 1 años 2 meses 25 días)

Las cerdas gestantes de granjas porcinas comerciales pueden experimentar situaciones dolorosas, como las cojeras, un indicador esencial para evaluar el bienestar de las cerdas. En este estudio se investigó el efecto de las cojeras durante el último tercio de la gestación sobre el rendimiento reproductivo y las concentraciones placentarias de glucocorticoides en cerdas. Se realizaron exámenes periódicos de la locomoción en dos granjas porcinas comerciales mediante un sistema de puntuación validado de 0 a 5 (0: locomoción normal; 5: animal decaído). Las cerdas de ambas granjas (N = 511) se agruparon según sus puntuaciones medias de locomoción. En la granja 1, 30 cerdas se seleccionaron y agruparon como cojas o no cojas. En la granja 2, 39 cerdas se seleccionaron y agruparon como no cojas, moderadamente cojas o gravemente cojas. En ambas granjas se registraron los datos reproductivos (duración de la gestación, peso de la camada, peso medio de los lechones, tamaño de la camada y número de lechones nacidos vivos/momificados/muertos). Además, en la granja 2, también se registraron la puntuación del retraso del crecimiento intrauterino de los lechones y el número de lechones muertos durante la primera semana y se recogieron muestras de placenta para determinar sus concentraciones de cortisol/cortisona. Para analizar los datos se utilizó un modelo lineal mixto.

La proporción de cojeras en cerdas gestantes (N = 511) fue >40% y la duración de la gestación tendió a disminuir con la presencia de cojeras en ambas granjas. En la granja 2, las cerdas moderadamente cojas tuvieron una mayor relación cortisol/cortisona en la placenta en comparación con las cerdas no cojas y gravemente cojas.

En conclusión, las cojeras fueron elevadas en las cerdas evaluadas, lo que puede reducir la duración de la gestación y la eficiencia de la placenta para proteger a la descendencia frente a la respuesta de estrés de las cerdas.