Efectos de la suplementación con carbohidrasas sobre el microbioma fecal de cerdas y lechones

La harina de maíz y soya es la principal fuente de energía y proteína en las dietas porcinas. Una dieta con maíz y soya generalmente contiene polisacáridos no amiláceos, incluyendo arabinoxilanos, xilanos, fitatos, glucanos y celulosa, que no pueden ser digeridos en el intestino delgado del cerdo debido a la falta de enzimas necesarias para degradar los nutrientes. La adición de multicarbohidrasa, una mezcla de enzimas compuesta por xilanasa, β-glucanasa y celulosa, se ha sugerido como un enfoque eficaz para mejorar la disponibilidad de polisacáridos no amiláceos. Los carbohidratos digeridos también pueden ser buenas fuentes de nutrientes fermentables para la microflora intestinal del cerdo. El tracto gastrointestinal de los cerdos está colonizado por una microbiota muy diversa que tiene un efecto considerable en la respuesta inmunitaria, la fisiología intestinal y el desarrollo del animal. Así pues, el objetivo de este estudio fue evaluar los efectos de la suplementación con multicarbohidrasa en dietas de cerdas en lactación sobre la composición de la microbiota intestinal de las cerdas y sus lechones. Para ello, un total de 12 cerdas lactantes (Landrace x Yorkshire x Duroc; 218,37 ± 5,5 kg de peso medio; 2,0 de paridad media) se asignaron aleatoriamente en 12 corrales. El día 114 de gestación las cerdas se asignaron aleatoriamente a 2 tratamientos dietéticos: una dieta basada en harina de maíz y soya y una dieta de harina de maíz y soya suplementada con 0,01% de multicarbohidrasa. Se recogieron muestras fecales de las cerdas y los lechones en los días 7 y 28 después del parto de tres cerdas seleccionadas aleatoriamente en cada grupo y tres de sus lechones seleccionados al azar.

Según los resultados de la secuenciación del amplicón del gen 16S rRNA, la multicarbohidrasa generó cambios en la diversidad de especies y alteró la composición microbiana de las cerdas lactantes y sus lechones. En concreto, el tratamiento con multicarbohidrasa indujo un aumento de las proporciones de Lactobacillus en los lechones. Clostridium y Spirochaetaceae mostraron una proporción significativamente reducida en las cerdas tratadas con multicarbohidrasa el día 28.

Estos resultados respaldan los efectos beneficiosos de la adición de carbohidrasas en la dieta y su relación con la mejora de la producción debido a mejores resultados del huésped y la composición de la microbiota intestinal.