C Bickert. What happens if soya imports stop? 2008. agrifuture Spring/08: 8-11
15-may-2008 (hace 16 años 6 meses 7 días)En 2009 aparecerá una nueva generación de variedades de soja en EEUU. La primera de ellas, MON 89788 (también conocida como Roundup Ready-2-Bohne), que espera su aprobación en EEUU este mismo año aunque, como consideración al mercado europeo, su cultivo se demorará hasta 2009. Su aprobación en Europa no puede esperarse hasta 2009, lo que comportaría una escasez de soja en otoño de 2009.
La Comisión Europea contempla tres escenarios:
1. Reemplazo total de las importaciones de EEUU con soja procedente de otros países. Las importaciones de EEUU ascienden a 4 m Tm, que podrían ser reemplazadas con mayores contingentes de Suramérica, con poca repercusión en el precio.
2. Si las nuevas variedades del OGM también se cultivan en Argentina, la repercusión sería mucho más fuerte. Hasta 7 m Tm podrían comprarse a Brasil. Esto supondría un déficit de unas 10 m Tm, dos tercios de las cuales podría ser substituidas por una mayor producción de colza y girasol en la UE y la importación de colza, quedando un déficit de 3,3 m Tm. Los expertos calculan que el precio de la harina de soja aumentaría en la UE un 60 %. Este precio provocaría una caída de la demanda de harina de soja en Europa del 6 %. A nivel mundial, sobrarían 10 m Tm de harina de soja que bajarían los precios, haciendo el cerdo y el pollo europeos todavía menos competitivos. La importación extracomunitaria de cerdo aumentaría un 74 % en 2010. El precio de la carne de cerdo aumentaría un 10 % en Europa, dentro de la ciclicidad habitual.
3. Si Brasil también produce soja OGM no aprobada en la UE los efectos pueden ser dramáticos. Esto supondría la imposibilidad de importar soja de los principales productores y la pérdida de 32 m Tm, con pocas posibilidades de substitución. Con todas las medidas compensatorias, quedaría un déficit de 26 m Tm. La alimentación sería tan cara que la producción caería un 28 % en 2009 y un 35 % en 2010. La UE se convertiría en un gran importador de carne de cerdo y el consumo caería un 25 %.
Hasta el momento Argentina ha declarado que no utilizará la nueva variedad hasta que la UE la apruebe. El 42 % de sus exportaciones de soja van a Europa, con lo que no parece muy probable que esta actitud cambie. Algo parecido pasa con Brasil, cuyas exportaciones a Europa representan el 51 %.
Por otro lado, la demanda de China puede desestabilizar la influencia de Europa en Suramérica. Además, las plantaciones ilegales de OGM en Suramérica pueden contaminar envíos que van a ser rechazados. En Brasil, esto ya ha causado grandes problemas comerciales.