Francia: el aumento de los costes, un impacto difícil de estimar

Jean-Pierre Joly
27-feb-2008 (hace 16 años 9 meses 26 días)

Francia alcanzó su máxima producción porcina en el año 1999, con 27 millones de cerdos producidos. Desde entonces la producción se ha estabilizado en los 25,7 millones, una reducción del 5% respecto al máximo nivel alcanzado. Con una reducción en el número de cerdas (-8% respecto a 2001), la producción se mantiene gracias a una mejora de los resultados técnicos. La producción francesa es ligeramente excedentaria respecto al consumo (107 %), exportando 620.000 toneladas de carne e importando unas 520.000, siendo el primer cliente Italia y el primer proveedor España.

El consumo de carne de cerdo alcanza los 35,4 kg por habitante. La red de distribución se encuentra muy concentrada teniendo en cuenta que las grandes y medianas superficies representan un 85% de la venta.

Estructura de las explotaciones francesas y de la producción

La producción porcina francesa se encuentra mayoritariamente en manos de ganaderos que son propietarios de sus instalaciones y de sus animales, la mayor parte de ciclo cerrado. El tamaño medio de estas explotaciones de ciclo cerrado es de unas 200 madres. De las 14.000 explotaciones francesas, la mitad se encuentran especializadas en porcino mientras que la otra mitad son explotaciones mixtas: 15% "cereales y cerdos", 25% "bovinos de leche y cerdos"... La tendencia es a la especialización. La producción se concentra en el oste de Francia, con un claro predominio de la Bretaña, donde se encuentran un 57% del total de efectivos.

Los productores porcinos franceses tienen la particularidad de reunirse en agrupaciones de productores, organizándose así un 95% de la producción. El papel de las agrupaciones de productores es aportar a los ganaderos asociados:

  • soporte técnico
  • soporte sanitario
  • recomendaciones sobre edificación, medioambiente...
  • recomendaciones sobre genética

Estas agrupaciones coordinan también las gestiones de trazabilidad y calidad.

La comercialización está garantizada mediante las agrupaciones de productores por cuenta de los ganaderos, aunque la comercialización es más bien una relación proveedor/cliente sobre las cantidades puesto que el precio de referencia francés se fija en el Marché du Porc Breton (MPB) por las agrupaciones que comercializan los cerdos de sus asociados (18% de la producción francesa).

La comercialización de los cerdos se basa en dos pilares: peso/clasificación de las canales y un precio de referencia fijado por el MPB. Más del 80% de los cerdos franceses son pesados y clasificados por los agentes de Uniporc Ouest. En las otras regiones, las interprofesiones son las que controlan las operaciones.

Estructura de los mataderos y de la industria

La mayor parte de los sacrificios se concentran en la zona oeste de Francia (70% de los sacrificios), localizándose la mayoría de mataderos con un nivel de sacrificio por encima de 1 millón de cerdos/año en la región de la Bretaña o en un departamento limítrofe.

Por contra la industria chacinera se encuentra mejor distribuida en el territorio, con importante actividad, además de en la Bretaña, en las regiones de Rhone Alpes y en Pays de Loire.

Consecuencias del aumento del precio de las materias primas

Durante el pasado año 2007 el precio medio de referencia del MPB se situó en los 1,118€, siendo el precio medio pagado teniendo en cuenta las primas por clasificación y trazabilidad de 1,25€ (una disminución del 10% en comparación con 2006).

La situación financiera de los ganaderos se deterioró en 2007, especialmente hacia finales de año con el aumento del precio de las materias primas. De media anual, los costes en 2007 serán del orden de un 15% superiores a los de 2006, alcanzando los 1,40€/kg canal contra los 1,21€/kg canal en 2006. Si bien el precio del cerdo en 2007 (1,25€/kg canal) no es catastrófico en relación con el coste de 2006, las pérdidas por cerdo sobre el ejercicio 2007 son de 13€. Esta situación se ha degradado de forma muy importante durante finales de 2007, con un coste de producción por encima de los 1,55€/kg canal. Con un precio percibido de 1,20€ durante este periodo, la pérdida estimada por cerdo es de 30€!

Este nivel de pérdidas no puede sostenerse durante demasiado tiempo. Cuanto más largo sea el periodo, mayores y más importantes serán las consecuencias sobre el nivel de producción. Por ahora, los ganaderos intentan economizar de todas las formas posibles: menor renovación de primerizas, venta de lotes de cerdos con menor peso para abastecer la tesorería reduciendo al mismo tiempo la factura del pienso, venta de lechones excedentarios, cese de la actividad de cría de lechones en explotaciones mixtas... No cabe duda de que la producción a finales de 2008 será inferior a la de finales de 2007.

El aumento del precio de las materias primas es aún demasiado reciente para analizar todas las consecuencias. El ciclo de producción es relativamente largo. En Francia, a falta de mercados significativos de lechones para la restauración, todo lechón que nace se engorda. La reducción de la producción llegará de forma lenta, combinando reducción estacional de la producción a partir de marzo y reducción de la producción estructural si se alarga la falta de rentabilidad.