Principales aspectos para una gestión correcta de los purines

Jordi Codina
14-may-1999 (hace 25 años 7 meses 8 días)

Qué son los purines?

Los purines son las deyecciones animales (orina y excrementos sólidos), con restos del lecho, alimentos y agua en cantidades variables, que resultan del sistema productivo de los animales y que presentan consistencia fluida o pastosa (con un contenido en materia seca siempre inferior al 15%).

Cuándo los purines pueden ser un problema medioambiental?

Aunque los purines son en principio un abono con un gran valor fertilizante, pueden ser un problema ambiental en zonas con una elevada carga ganadera, en el momento en que se rompe el equilibrio entre la actividad agrícola y la producción ganadera. En estas condiciones se suele producir un sobreabonado de los cultivos, y entonces los purines pasan a ser un residuo contaminante para el suelo y la atmósfera, pero sobretodo para la aguas superficiales y subterráneas.

· Sobre el suelo: Salinización del suelo y bioacumulación de metales (cobre o cinc).

· Sobre la atmósfera: Problemas de malos olores, debido a la evaporación de compuestos amoniacales y la putrefacción de la materia orgánica.

· Sobre las aguas superficiales y subterráneas: Principalmente contaminación de las aguas subterráneas por nitratos, ion de alta solubilidad.

Figura 1. Ciclo del nitrógeno en el subsuelo

Ciclo del nitrógeno en el subsuelo

Principales aspectos para una gestión integral de los purines

Una vez asumida la problemática del excedente de purines y teniendo en cuenta que la legislación actual es cada vez más restrictiva, se hace necesario planificar estrategias para minimizar su producción y gestionar correctamente las deyecciones ganaderas.

1. Caracterización de los purines de la explotación ganadera

En primer lugar es necesario caracterizar cuantitativamente y cualitativamente el purín. Esto nos permite detectar posibles problemas estructurales de las instalaciones o del manejo, y conocer la capacidad fertilizante real del purín.

2. Mejoras en el sistema de manejo

Realizar mejoras tecnológicas en el sistema de manejo (bebederos, sistema de limpieza, recogida de aguas pluviales, sistema de ventilación, etc.) es una actuación decisiva para reducir la producción volumétrica de los purines.

3. Disponer de un sistema de almacenaje de purines correcto

Los sistemas de almacenamiento de purines deberán garantizar la total estanqueidad para evitar posibles pérdidas por derrames, fracturas o infiltraciones. También es esencial que su capacidad sea adecuada, que permita el almacenamiento de los purines durante los períodos en que no es posible su aplicación en los cultivos (4-6 meses).

4. Realizar una aplicación correcta en las tierras agrícolas

Cuantificar el excedente real de purines, teniendo en cuenta la capacidad de extracción de nutrientes de los cultivos. Realizar planes de abonado, para planificar la dosis de aplicación en función de las necesidades de los cultivos.

Las necesidades de abonado se pueden calcular a partir de la ecuación básica de fertilización:

Fertilización = Extracción (necesidad en elementos fertilizantes del cultivo) + Variación de reserva (en función de las características del suelo) + Pérdidas (fracción de elementos que desaparecen por lavado, volatilización o por desnitrificación)
Es importante suministrar los nutrientes necesarios para el buen crecimiento de los cultivos, y evitar al máximo la pérdidas de nutrientes por escorrentía superficial o infiltración en las aguas subterráneas.

5. Sistemas de pre-tratamiento o tratamiento de los purines

En el caso de disponer de un excedente de purines que no es posible aplicarlo como fertilizante en tierras agrícolas, se puede plantear la implantación de sistemas de tratamiento que permitan depurar, parcial o totalmente, el purín excedentario.

· Aplicación, en la propia explotación, de sistemas de pre-tratamiento sencillos, y de baja inversión, que permiten mejorar las propiedades agronómicas del purín y reducir su impacto sobre el medio ambiente. De todos los sistemas de pre-tratamiento existentes, destacamos un sistema mixto (físico-biológico) de separación sólido-líquido por tamizaje con adición de un coadyuvante microbiológico.

· Aplicación de sistemas de tratamiento, a gran escala, que permiten depurar los purines. Estos sistemas de depuración suponen inversiones muy elevadas, y son aplicables en zonas donde existen grandes cantidades de purín excedentario, y donde la implantación de las anteriores medidas no es suficiente para asegurar una gestión correcta de las deyecciones ganaderas.