La alimentación de las cerdas con ácidos grasos poliinsaturados n-3 (LCPUFA) ha presentado diferentes respuestas sobre el crecimiento de las camadas, la mortalidad pre-destete y el consiguiente desarrollo reproductivo de la cerda. En el presente trabajo se plantearon dos hipótesis: (1) la alimentación de las cerdas gestantes con un aceite de origen marino rico en LCPUFA protegidos podría mejorar el crecimiento de sus camadas; y (2) la alimentación continua con este suplemento durante la lactación y tras el destete podría contrarrestar los efectos negativos del catabolismo inducido durante la lactación, usando un modelo experimental establecido el cual implica una restricción de alimento de las cerdas primíparas lactantes. Para ello se utilizaron un total de 117 cerdas primíparas que se emparejaron por peso el día 60 post-cubrición (PC), se asignaron a ser cerdas control (CON) alimentadas con una dieta estándar de gestación y lactación, o cerdas tratadas (LCPUFA) alimentadas con una dieta suplementada con 84 g/día de un suplemento rico en LCPUFA n-3, desde el día 60 PC de la primera gestación, durante los 21 días de lactación, y hasta el momento del sacrificio el día 30 PC de su segunda gestación. Todas las cerdas estuvieron restringidas al alimento durante los últimos 7 días de la lactación para inducir el proceso de catabolismo, el cual determinaría un punto de inflexión hacia un desafío propiamente metabólico y así poder determinar los efectos beneficiosos de la suplementación con LCPUFA n-3 en la reproducción.
En ausencia de efectos sobre el tamaño de la camada y sobre el peso al nacer, el aporte de LCPUFA n-3 tendió a mejorar la ganancia de PV de los lechones desde el nacimiento hasta los 34 días post-destete (P = 0,06), mientras que se observó un incremento de la mortalidad pre-destete (P = 0,05). No se modificó la utilización de energía por parte de la cerda durante la lactación, así no hubo mejoras en el estado catabólico de las cerdas. La suplementación desde el destete hasta el día 30 PC de la segunda gestación no tuvo un efecto sobre los pesos de los embriones, índices de ovulación ni sobre la supervivencia de los embriones, pero incrementó de forma estadísticamente significativa el peso del cuerpo lútero (CL; 341 vs. 376 ± 46,5 mg; P = 0,001). Los niveles de ácido eicosapentaenoico y ácido docosahexaenoico (DHA) fueron mayores en los sueros de las cerdas y los CL (P < 0,001), mientras que únicamente los niveles de DHA incrementaron en los embriones (P < 0,01).
En conclusión, la suplementación de las cerdas con LCPUFA n-3 tendió a mejorar el crecimiento de las camadas, pero no tuvo un efecto global sobre los rendimientos reproductivos.
MN Smit, JL Patterson, SK Webel, JD Spencer, AC Cameron, MK Dyck, WT Dixon, GR Foxcroft. 2012. Responses to n-3 fatty acid (LCPUFA) supplementation of gestating gilts, and lactating and weaned sows. Animal. doi:10.1017/S1751731112002236.