Esto demuestra que ante una deficiencia en arginina los lechones no son capaces de sintetizar suficiente aminoácido para maximizar el crecimiento. Se ha demostrado que el origen de la deficiencia en la síntesis de citrulina y arginina es la baja concentración de N-acetilglutamato (que activa dos enzimas implicadas) durante la lactancia.
La administración oral de un análogo del N-acetilglutamato mejoró los niveles de arginina (68%) y la ganancia de peso (61%) de lechones entre 4-14 días de edad. Por lo tanto, la activación de la síntesis de citrulina y arginina propició un medio efectivo para mejorar el rendimiento de los lechones.
Estos resultados aportan nueva información sobre el uso de aminoácidos por parte de lechones neonatos. Esta información puede ser muy importante para mejorar la eficiencia en producción porcina.
G. Wu, D.A Knabe, S.W. Kim 2004. J Nutr. 134 (10 Sup. l):2783S-2790S