Estos resultados indican que tanto la exposición de los granjeros a las bacterias resistentes como el uso de antimicrobianos pueden constituir una fuente de resistencia en humanos, si bien su impacto sobre la salud humana es desconocido. El consumo de antibióticos por parte de los propios granjeros parece constituir un riesgo significativo para el desarrollo de la resistencia. Las cepas de E. coli fecal procedentes de los granjeros pueden actuar como depósito de los genes que confieren resistencia para patógenos animales y/o humanos.
Akwar TH, Poppe C, Wilson J, Reid-Smith RJ, Dyck M, Waddington J, Shang D, Dassie N, McEwen SA, Risk factors for antimicrobial resistance among fecal Escherichia coli from residents on forty-three swine farms, Microb Drug Resist. 2007. Vol. 13(1): 69-76.