En total se usaron 42 lechones castrados de 27 días de edad y 8 kg de peso vivo que se separaron en 7 grupos de 6 animales. El día del destete se sacrificaron 6 lechones (grupo control) para estudiar la estructura intestinal inicial. Los demás grupos recibieron dietas líquidas con el 24 % de energía en forma de glucosa, lactosa o bien almidón, de esta forma había dos grupos que recibían la misma dieta. Uno de ellos (3x6 lechones) se sacrificó el día 3 post-destete y el resto al cabo de una semana (día 10).
Se comprobó que tras el destete la altura de las vellosidades se redujó y bajó el pH del intestino grueso. Por otro lado el crecimiento de los lechones tampoco fue distinto entre grupos, como tampoco lo fueron el peso de las vísceras ni la estructura del intestino.
Según estos resultados, la lactosa no permite reducir el impacto del destete sobre la estructura intestinal al menos cuando se compara con glucosa o almidón.
M.A. Vente-Spreeuwenberg, J.M. Verdonk, M.W. Verstegen y A.C. Beynen. British Journal of Nutrition 2003. 90(5): 907-913