Se utilizaron un total 239 cerdas gestantes distribuidas entre tratamientos experimentales que consistieron en: una dieta control (en base a maíz-soja) o una dieta con alto contenido en fibra (utilizando cáscara de soja como fuente de fibra) combinados con la frecuencia de alimentación (una o dos veces al día). Los tratamientos experimentales se ofrecieron desde el día posterior al destete hasta el día 109 de gestación. Para las determinaciones de comportamiento, se utilizaron 68 cerdas (16 de cada tratamiento experimental); las cuales fueron filmadas un total de tres veces durante 24h al día (el día posterior al destete y a los días 40 y 80 días de gestación). Se tomaron muestras de saliva para la determinación de cortisol el día posterior al destete y los días 42 y 82 de gestación. Adicionalmente, se administró una dieta marcada con 0,25% de óxido de cromo a 36 animales para determinar la digestibilidad de la energía y el nitrógeno. A los días 0, 40 y 80 de gestación, a las 24 h después del parto y en el día del destete, se pesaron los animales y se midió el espesor de grasa dorsal.
Los animales alimentados con dietas de alto contenido en fibra estuvieron menos tiempo acostadas mientras que destinaron más tiempo a comer que con la dieta control. Alimentar los animales con dietas de alto contenido en fibra no afectó el comportamiento estereotípico medido durante 24 h o entre comidas. No se observó ningún efecto debido a la frecuencia de alimentación sobre las concentraciones de cortisol en saliva. La digestibilidad de la materia seca, el nitrógeno y la energía se vio reducida en las dietas con alto contenido en fibra respecto a la dieta control. Las cerdas alimentadas con dietas de alto contenido en fibra ganaron menos peso y depositaron menos grasa dorsal que en los animales alimentados con la dieta control durante la gestación. El total de lechones nacidos se vio también reducido en los animales alimentados con las dietas de alto contenido en fibra.
El uso de dietas con alto contenido en fibra, utilizando cascarilla de soja, y alimentar los animales dos veces al día no tiene ningún efecto sobre el bienestar del animal, en cuanto a reducir los comportamientos estereotípicos, ni mejora los rendimientos productivos.
J P Holt, L J Johnston, S K Baidoo and G C Shurson (2006) Journal of Animal Science, 84: 946-955.