La producción utilizable de cereales se proyecta en 270,9 millones de toneladas para 2022/23, una disminución del 5,1 % con respecto al promedio de cinco años (y una disminución del 7,8 % interanual). Esto se debe en gran parte a las condiciones de sequía que afectaron al maíz en particular (-19,3% en el promedio de 5 años).
La producción de trigo blando se pronostica en 127,0 millones de t (-2,4%), trigo duro en 7,4 millones de t (-4,9%), maíz en 55,5 millones de t (-23,7%), cebada en 51,5 millones de t (-1,0%), triticale con 11,3 millones de t (-2,1%), avena con 7,6 millones de t (+1,9%) y centeno con 7,5 millones de t (-4,0%).
Se espera que la mala cosecha, combinada con los altos precios de los cereales y una disminución anticipada en la producción de carne, reduzca el uso de cereales para alimentos en un 2,3 % interanual. Se espera que el uso alimentario aumente ligeramente (+0,7% interanual). Sin embargo, el comercio de cereales podría crecer un 12,3 % en comparación con la campaña anterior (incluyendo un +6,5 % de las exportaciones y un +24,7 % de las importaciones).
Se espera una fuerte producción de semillas oleaginosas de la UE (especialmente de canola) en 2022/23 (32,2 millones de t, +8,5% por encima del promedio de 5 años).
October 6, 2022/ European Commission/ European Union.
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