F.R.C.L. Almeida, G.S. Machado, A.L.C.C. Borges, B.O. Rosa and D. O. Fontes. Consequences of different dietary energy sources during follicular development on subsequent fertility of cyclic gilts. animal / Volume 8 / Issue 02 / February 2014, pp 293-299. DOI: http://dx.doi.org/10.1017/S1751731113002115
20-feb-2015 (hace 9 años 9 meses 4 días)El objetivo del presente estudio fue investigar los efectos de la mejora de insulina inducida por la dieta durante la fase lútea tardía sobre la posterior fertilidad de las primerizas. Cincuenta y dos primerizas cíclicas fueron sometidas a tratamientos dietéticos con dos fuentes de energía diferentes: almidón de maíz (T1) y aceite de soja (T2). Las dietas experimentales proporcionaban cantidades similares de energía, pero de diferentes fuentes. Las primerizas fueron alimentadas ad libitum, desde el día 8 del ciclo estral hasta el siguiente celo. Se realizó una recogida de muestras de sangre en un subgrupo de 20 primerizas, los días 14 y 21 del ciclo, para el análisis de glucosa e insulina y, tras la detección de la ovulación hasta 18 h después de la ovulación, para la progesterona. Todas las primerizas fueron sacrificadas al día 28 de gestación y los tractos reproductivos fueron recuperados para su examen posterior.
Las primerizas T1 mostraron un mayor pico de insulina postprandial los días 14 y 21 y niveles más bajos de glucosa 4 h después de comer el día 14 (P<0,05), sin embargo, no hubo efectos del tratamiento sobre las concentraciones de progesterona plasmática. Las fuentes de energía en la dieta no afectaron la ingesta media diaria de alimento, el peso corporal y la grasa dorsal al día 28 de gestación. La duración del ciclo estral, la duración del estro y el tiempo de ovulación no se vieron afectados tampoco por los tratamientos nutricionales anteriores. Las primerizas T1 mostraron mayores tasas de ovulación, número de embriones, pesos del embrión y pesos de la placenta (P<0,05). No se observaron efectos del tratamiento sobre la tasa de embarazo, la tasa de supervivencia de los embriones y el volumen de líquido amniótico. Se observó una correlación positiva entre la concentración de progesterona 18 h después de la ovulación y la tasa de ovulación (r=0,75; p<0,01).
Estos resultados sugieren que es posible manipular la respuesta de la insulina en la dieta en las primerizas cíclicas y, de esta manera, mejorar la eficiencia reproductiva al alimentar con almidón de maíz, como principal fuente de energía, durante las fases lútea tardía y folicular del ciclo.