El consumo de proteína pero no el nivel de consumo de pienso afecta a la energía en cerdos en fase acabado

Moehn, S., Levesque, C. L. and Ball, R. O. (2013) Protein intake but not feed intake affects dietary energy for finishing pigs. Journal of Animal Physiology and Animal Nutrition. 97: 174-204. DOI: 10.1111/j.1439-0396.2011.01262.x

28-may-2013 (hace 11 años 5 meses 25 días)

El objetivo de este estudio fue evaluar el efecto del nivel de alimentación y el nivel de proteína en la dieta sobre la energía metabolizable (EM) y la energía neta (EN) de piensos para cerdos de acabado. Cambiando el nivel de alimentación, es decir, alimentación restringida vs. ad libitum se podría alterar el ratio de proteína-deposición lipídica, ya que la proteína y la deposición de lípidos difieren en su eficiencia energética. La eficiencia en la retención de energía podría cambiar y por ello afectar el valor de EN de la dieta. Veinticuatro cerdos castrados, distribuidos en dos bloques, fueron alojados en 12 corrales individuales y alimentados ad libitum (AL) o restringidos (AR), con un nivel de alimentación dos veces el requerimiento de EM para mantenimiento (458 KJ/kg0.75), entre los 55 y 95 kg de peso. Entre estos niveles de alimentación, los animales recibieron una dieta baja en proteína (BP; 11,2% PB, 0,61% lisina) o alta en proteína (AP; 20,2% PB, 0,61% lisina), con dietas formuladas con un contenido en energía digestible similar y con una distribución aleatoria en un diseño “cross-over”. La EN de la dieta fue calculada a partir de la producción de calor basándose en la calorimetría indirecta durante 24 h, seguida de un periodo de 7 d de balance de nitrógeno. El balance de nitrógeno se llevó a cabo mediante una recolección cuantitativa de heces y orina.

Los resultados mostraron como el consumo fue mejor para AP que para BP cuando el consumo fue ad libitum (P = 0,001). El nivel de proteína no afectó a la ganancia diaria, sin embargo, la dieta AP mejoró el índice de conversión (P = 0,003). El experimento también demostró que la EM y EN no fueron alteradas por el nivel de alimentación pero disminuyeron cuando el contenido en proteína aumentó. Reduciendo el nivel de proteína se redujeron las pérdidas de energía a través de la orina e incrementó la retención de energía pero esto no afectó a la producción de calor. El efecto de la restricción de proteína en la dieta fue evidente en el nivel de EM y se mantuvo en un nivel similar para el nivel de EN ya que la utilización de la EM no se vio afectada por el nivel de proteína de la dieta. La EM y la EN de la dieta disminuyeron un 0,012 MJ/kg (P = 0,014) y 0,018 MJ/kg (P = 0,062), respectivamente, por cada gramo por día de N ingerido.

Estos resultados sugieren que aunque hubo un efecto del nivel de proteína sobre la EN, el mayor efecto se produjo a nivel de la EM. Sin embargo, la predicción de EM y EN se podría mejorar teniendo en cuenta un valor de energía para la proteína de la dieta que puede cambiar con el contenido de la misma.