Crecimiento intrauterino de la progenie en cerdas gestantes alimentadas con dietas altas en proteína y bajas en carbohidratos

En la cerda primeriza, la gestación incrementa los requerimientos nutricionales de mantenimiento y crecimiento así como los requerimientos para el desarrollo fetal, lo que puede generar una competencia materno-fetal por los nutrientes. Previamente se observó que cerdas alimentadas con dietas con alto y bajo contenido en proteína presentaron retrasos en el crecimiento intrauterino (RCIU). Por lo tanto, los objetivos de este estudio fuero monitorizar los cambios de los metabolitos del plasma materno y las concentraciones de hormonas durante los estadios temprano, medio y final en función de la dieta en cerdas gestantes, y poner a prueba la hipótesis de que cambios en el peso corporal (PC) materno, grasa corporal, o los metabolitos plasmáticos y las hormonas relacionadas con el RCIU dependen de la dieta así como proporcionar pistas sobre las razones metabólicas subyacentes. Para ello se utilizaron un total de 95 primerizas (Edad media = 241±4 d y PC= 150±10 kg) Landrace Alemán que fueron asignadas aleatoriamente a uno de los tres grupos dietéticos los cuales diferían en el contenido de proteína: bajo (6,5%, BP), adecuado (12,1% AP), y alto (30% HP). Las dietas en base a maíz, cebada y soja fueron isoenergéticas y ajustadas para el contenido de carbohidratos. En los días 25, 24, 66 y 108 post cubrición (dpc) se tomaron muestras de sangre en ayunas. En el día 92 dpc se determinó el perfil metabólico diurno.

La urea sérica y el glucagon en plasma en ayunas fue mayor debido a la dieta HP. Las lipoproteínas de alta densidad (HDL), el % HDL y el cortisol se redujeron en los animales HP comparado con los AP. Se observaron menores concentraciones de la urea sérica y la proteína, del factor-I de crecimiento de la insulina plasmático, las lipoproteínas de baja densidad (LDL) y de la progesterona en el grupo LP comparado con el AP y HP. Las concentraciones de glucosa plasmática en ayunas, de insulina y leptina se mantuvieron sin cambios. El perfil metabólico diurno mostró menor glucosa en las cerdas HP mientras que las concentraciones de ácidos grasos no esterificados (AGNE) fueron superiores en las cerdas HP en comparación con las cerdas AP y LP. En las cerdas HP, las concentraciones de urea alcanzaron aproximadamente un 300% de los valores observados en las cerdas AP (P < 0,001), mientras que los niveles de urea en cerdas LP fueron aproximadamente un 60% de los valores del control (P < 0,001). El colesterol total plasmático fue superior en cerdas LP que en cerdas AP y HP. En cerdas AP, el peso de la camada se relacionó positivamente con los niveles de insulina y el ratio insulina:glucosa y negativamente con el ratio glucagon:insulina en el día 66 dpc, mientras que en las cerdas HP el peso de la camada se asoció positivamente con las concentraciones de AGNE.

En conclusión, el RCIU en cerdas alimentadas con dietas altas en proteína y bajas en carbohidratos fue probablemente debido a la glucosa y a un déficit de la energía mientras que las cerdas alimentadas con dietas bajas en proteína y altas en carbohidratos fueron posiblemente una respuesta al déficit de aminoácidos indispensables los cuales empeoraron el metabolismo de lipoproteínas y favorecieron el depósito materno de lípidos.