Influencia de la vitamina D3 en los parámetros productivos y salubridad del lechón

La vitamina D juega un papel esencial en el mantenimiento de una adecuada homeostasis del Ca y P en el organismo de los mamíferos. Debido a que todo el proceso de producción porcina se desarrolla en ambientes controlados, la luz solar como aporte de vitamina D no puede tenerse en cuenta en el lechón recién nacido, lo cual genera un impacto en el crecimiento del esqueleto y la función muscular normal. Estudios previos indicaron que los lechones destetados tenían niveles inferiores a lo esperado de vitamina D lo que podría ser la causa de una inadecuada mineralización de los huesos y el desarrollo de microfracturas. Por lo tanto, el objetivo de este estudio fue determinar los efectos de la suplementación oral de vitamina D₃ en los crecimientos, las concentraciones séricas de 25(OH)D₃ y la mineralización ósea de lechones pre- y post-destetados. Se utilizaron un total de 270 lechones de 29 camadas (inicialmente de 2 días de edad) durante 52 días. Los tratamientos experimentales consistieron en 3 dosis orales: (1) control (1 mL de aceite de cacahuete), (2) 40.000 UI de vitamina D3 re-suspendida en 1 mL de aceite de cacahuete, o (3) 80.000 UI de vitamina D3 re-suspendida en 1 mL de aceite de cacahuete. Los lechones se pesaron inicialmente en dos días distintos (días 0 o 2), distribuyendo los lechones en el test 1 o 2 después del nacimiento. Dentro de una misma camada, los lechones se asignaron en grupos de un mismo peso y se distribuyeron en uno de los 3 tratamientos experimentales. Previa a la suplementación, se tomaron muestras de sangre de 29 grupos (en total, 87 lechones) y de los mismos grupos se sangraron periódicamente durante el estudio para medir la concentración sérica de 25(OH)D₃. Todos los lechones se pesaron los días 10 y 20. El día 20, los lechones se destetaron y distribuyeron en las naves de transición donde se alimentaron con dietas estándares desde el día 20 hasta el día 52 de edad. Aleatoriamente, se seleccionaron animales los días 19 y 35 para el examen post-mortem. El día 19, se necropsiaron 18 lechones (6 grupos y 6 lechones por tratamiento) y el día 35, se necropsiaron 12 lechones (6 lechones control y 6 lechones los cuales recibieron la dosis alta de vitamina D₃, 80.000 UI). Se recogieron muestras de hueso y tejido. Se analizó tanto el contenido de cenizas como la histopatología de las muestras de hueso.

El incremento de la dosis oral de vitamina D₃ incrementó la concentración sérica de 25(OH)D₃ los días 10 y 20 (cuadrática, P < 0,01), y el día 30 (lineal, P < 0,01). Durante la lactación, no se observaron diferencias en la ganancia media diaria (GMD) entre tratamientos, pero en el destete, los lechones que previamente se suplementaron con vitamina D₃ presentaban 0,14 kg más que los lechones control. Durante el período de transición (del día 20 al 52), no se observaron diferencias en la GMD, la ingestión media diaria ni en el índice de conversión; sin embargo, el día 52, los lechones que previamente se suplementaron con vitamina D₃ fueron 0,22 kg más pesados que los lechones control. La suplementación con vitamina D₃ no tuvo efectos en la concentración de cenizas del hueso ni siquiera del fémur. No se identificaron lesiones patológicas mediante evaluación microscópica del hueso, a pesar del tratamiento son vitamina D₃.

La suplementación oral de vitamina D₃ no tuvo influencias en el crecimiento ni en las medidas óseas en este estudio, pero una mayor investigación sería de interés para probar la respuesta en condiciones de campo con más cambios en la salud de los animales.