Desarrollo folicular durante la fase lútea y tratamiento con altrenogest
NM Soede, EG Bouwman, P Langendijk, I van der Laan, A Kanora, B Kemp. Follicle Development during Luteal Phase and Altrenogest Treatment in Pigs. Reproduction in Domestic Animals. 2007. Vol. 42 (3): 329-332.
14-dic-2007 (hace 17 años 8 días)Con el objetivo de determinar si el aumento del índice de ovulación encontrado en estudios anteriores al utilizar altrenogest para la sincronización del ciclo estral en primerizas se encuentra relacionado con un aumento del tamaño del folículo al final del tratamiento comparado con los folículos al final de la fase lútea, 15 primerizas recibieron altrenogest durante 18 días a partir del quinto a séptimo día tras el inicio del primer estro mientras que otro grupo de cerdas control (n=15) no fueron tratadas.
Entre los días 10-12 del ciclo estral (en presencia de cuerpos lúteos), en las cerdas tratadas con el altrenogest el desarrollo medio de los folículos (determinado con ultrasonido) era de 2,51 ± 0,20 mm mientras que en las control fue menor (2,58 ± 0,16 mm). Durante los últimos días de tratamiento (cuando los cuerpos lúteos se encontraban en regresión) el tamaño medio de los folículos había aumentado hasta los 3,01 ± 0,31 mm. La tasa de ovulación subsiguiente en las cerdas tratadas fue de 16,6 ± 1,7 y en las control de 15,1 ± 1,2. El tratamiento con altrenogest dio lugar a un aumento del tamaño del folículo tras la regresión del CL, mostrando que la supresión del crecimiento del folículo debida al uso de altrenogest es menos severa que la supresión debida a la progesterona endógena (con o sin altrenogest). El tratamiento con altrenogest también dio lugar a una tasa de ovulación mayor. Sin embargo, no queda claro si el aumento del tamaño del folículo y una tasa de ovulación mayor tras el tratamiento con altrenogest se encuentran relacionados de forma causal, puesto que la relación entre los dos a nivel de un animal no era significativa.
Entre los días 10-12 del ciclo estral (en presencia de cuerpos lúteos), en las cerdas tratadas con el altrenogest el desarrollo medio de los folículos (determinado con ultrasonido) era de 2,51 ± 0,20 mm mientras que en las control fue menor (2,58 ± 0,16 mm). Durante los últimos días de tratamiento (cuando los cuerpos lúteos se encontraban en regresión) el tamaño medio de los folículos había aumentado hasta los 3,01 ± 0,31 mm. La tasa de ovulación subsiguiente en las cerdas tratadas fue de 16,6 ± 1,7 y en las control de 15,1 ± 1,2. El tratamiento con altrenogest dio lugar a un aumento del tamaño del folículo tras la regresión del CL, mostrando que la supresión del crecimiento del folículo debida al uso de altrenogest es menos severa que la supresión debida a la progesterona endógena (con o sin altrenogest). El tratamiento con altrenogest también dio lugar a una tasa de ovulación mayor. Sin embargo, no queda claro si el aumento del tamaño del folículo y una tasa de ovulación mayor tras el tratamiento con altrenogest se encuentran relacionados de forma causal, puesto que la relación entre los dos a nivel de un animal no era significativa.