Utilización de carbohidratos fermentables en la dieta para prevenir el desarrollo de la disentería porcina

L.E. Thomsen, K.E. Bach Knudsen, T.K. Jensen, A.S. Christensen, K. Møller and A. Roepstorff. Fermentable carbohydrates from chicory roots and sweet lupins can protect pigs from developing swine dysentery after experimental infection. Proceedings of the 19th IPVS Congress, Copenhagen, Denmark. 2006. Vol. 1.

18-abr-2007 (hace 17 años 7 meses 4 días)
El presente estudio tuvo como objetivo determinar el efecto de la adición en dieta de carbohidratos fermentables sobre el desarrollo de la disentería porcina debida a Brachyspira hyodysenteriae. Para ello 36 cerdos fueron alojados en uno de 4 grupos, dos grupos fueron alimentados con la dieta 1 (a base de cebada y tritical con torta de colza como carbohidratos resistentes) o con la dieta 2 (cebada y tritical con achicoria rica en fructano y polisacáridos no amiláceos de altramuces como carbohidratos fermentables). Después de un período de adaptación a las dietas de 2 semanas, todos los cerdos fueron inoculados experimentalmente con B. hyodysenteriae durante 3 días consecutivos mientras que un grupo para cada dieta fue inoculado también con 2000 huevos infectivos de Trichuris suis. Todos los cerdos fueron sacrificados a las 6 semanas post-infección.

Ningún cerdo sometido a la dieta 2 desarrolló signos clínicos de disentería durante el periodo experimental y no se detectó B. hyodysenteriae en las heces mientras que, por contra, el 94% de los cerdos alimentados con la dieta 1 desarrollaron enfermedad clínica y se detectó con frecuencia el patógeno en las heces. Respecto a T. suis, si bien no se observó efecto de la dieta, si se detectaron cambios histopatológicos en el epitelio intestinal en casi todos los cerdos con infección dual.

Los resultados del estudio muestran un claro efecto del tipo de carbohidratos de la dieta sobre la expresión clínica de la disentería porcina. La expresión clínica de la disentería podría estar relacionada con el nivel de NSP solubles de las dietas, cuyo aumento aumentaría el nivel de fermentación en el intestino grueso. En este estudio, la cantidad de carbohidratos fermentables era substancial en la dieta 2, confiriendo protección completa contra el desarrollo de la disentería, mientras que las elevadas cantidades de carbohidratos resistentes de la dieta 1 dieron lugar a disentería clínica en la mayoría de los cerdos.