Utilización de glutamina en porcino
Así lo ve Imasde
25-nov-2004 (hace 20 años 27 días) Introducción
En el momento del destete el lechón sufre un gran estrés debido a un cambio brusco de alimentación, ambiental y social, produciéndose una reducción del consumo y del crecimiento y, a veces, la aparición de enfermedades. La integridad de la mucosa intestinal será de vital importancia para asegurar el suministro de nutrientes y la barrera contra la entrada de patógenos. Asimismo, durante estos primeros meses de vida, el sistema digestivo del lechón es inmaduro y presenta un crecimiento alométrico positivo que puede representar hasta el 50% de incremento de peso vivo.
La mucosa intestinal ejerce un papel muy importante en la absorción y digestión de los alimentos. También actúa como barrera contra la invasión de millones de gérmenes presentes en los alimentos y el intestino. Su correcta funcionalidad dependerá de su integridad morfológica (vellosidades, criptas, tasa renovación, vascularización), fisiológica (secreción, permeabilidad) e inmunológica (células, inmunoglobulinas).
Los principales sustratos oxidativos de la mucosa intestinal son la glutamina, la glucosa, los cuerpos cetónicos y AGV, siendo la importancia de la glutamina y glucosa mayor en las partes proximales del intestino y durante la lactancia (es el principal aminoácido de la leche)
El aporte de aminoácidos a la mucosa intestinal es principalmente por vía enteral, llegándose a producir una utilización de hasta un 60% de los aminoácidos esenciales absorbidos. En situaciones de estrés o inmunoestimulación aumentan las necesidades de mantenimiento de ciertos aminoácidos, siendo la glutamina uno de ellos.
Papel fisiológico de la glutamina
A pesar de poderse sintetizar en gran cantidad en los tejidos, la glutamina puede considerarse como un aminoácido condicionalmente esencial en algunas especies o estados de desarrollo (Lacey y Wilmore, 1990), debido sus efectos beneficiosos sobre la mucosa intestinal, los cuales se describen a continuación:
Utilización en porcino
En la bibliografía se han descrito niveles de utilización del 1 al 5%, no observándose mejoras sobre la morfología intestinal en todos los casos. En los casos de infecciones experimentales o situaciones sanitarias más desfavorables las mejoras sobre la mucosa intestinal y los resultados productivos parecen más consistentes. Se han descrito mejoras en la altura, área y atrofia de las vellosidades, en la mitigación y más rápida recuperación de los procesos diarreicos, y en la disminución de las alteraciones en la permeabilidad por endotoxinas.
Hay que considerar que la glutamina es bastante inestable, pudiéndose degradar en el intestino antes de su absorción. Existe la posibilidad de usar dipéptidos como L-alanil-glutamina o L-glicil-glutamina, aunque su coste es superior.
Conclusión
A nivel experimental se ha demostrado la importancia de la glutamina en el metabolismo de la mucosa intestinal, beneficiando su integridad y funcionalidad. Sin embargo su utilización práctica, especialmente en lechones, aún no está clara tanto en aspectos como el nivel de inclusión, tipo de molécula y en la consistencia de las mejoras sobre la salud intestinal.
En el momento del destete el lechón sufre un gran estrés debido a un cambio brusco de alimentación, ambiental y social, produciéndose una reducción del consumo y del crecimiento y, a veces, la aparición de enfermedades. La integridad de la mucosa intestinal será de vital importancia para asegurar el suministro de nutrientes y la barrera contra la entrada de patógenos. Asimismo, durante estos primeros meses de vida, el sistema digestivo del lechón es inmaduro y presenta un crecimiento alométrico positivo que puede representar hasta el 50% de incremento de peso vivo.
La mucosa intestinal ejerce un papel muy importante en la absorción y digestión de los alimentos. También actúa como barrera contra la invasión de millones de gérmenes presentes en los alimentos y el intestino. Su correcta funcionalidad dependerá de su integridad morfológica (vellosidades, criptas, tasa renovación, vascularización), fisiológica (secreción, permeabilidad) e inmunológica (células, inmunoglobulinas).
Los principales sustratos oxidativos de la mucosa intestinal son la glutamina, la glucosa, los cuerpos cetónicos y AGV, siendo la importancia de la glutamina y glucosa mayor en las partes proximales del intestino y durante la lactancia (es el principal aminoácido de la leche)
El aporte de aminoácidos a la mucosa intestinal es principalmente por vía enteral, llegándose a producir una utilización de hasta un 60% de los aminoácidos esenciales absorbidos. En situaciones de estrés o inmunoestimulación aumentan las necesidades de mantenimiento de ciertos aminoácidos, siendo la glutamina uno de ellos.
Papel fisiológico de la glutamina
A pesar de poderse sintetizar en gran cantidad en los tejidos, la glutamina puede considerarse como un aminoácido condicionalmente esencial en algunas especies o estados de desarrollo (Lacey y Wilmore, 1990), debido sus efectos beneficiosos sobre la mucosa intestinal, los cuales se describen a continuación:
| -Fuente importante de energía para los enterocitos. |
| -Precursor de la síntesis de otros aminoácidos y nucleótidos. Siendo de gran relevancia en células con altos índices de división y/o secreción, como son los enterocitos y células del sistema inmune. |
| -Participan en la síntesis de mucinas, las cuales constituyen una barrera pasiva frente a los patógenos |
| -Indirectamente también estimula las rutas de detoxificación del amoniaco (metabolito bacteriano citotóxico sobre la mucosa intestinal). |
Utilización en porcino
En la bibliografía se han descrito niveles de utilización del 1 al 5%, no observándose mejoras sobre la morfología intestinal en todos los casos. En los casos de infecciones experimentales o situaciones sanitarias más desfavorables las mejoras sobre la mucosa intestinal y los resultados productivos parecen más consistentes. Se han descrito mejoras en la altura, área y atrofia de las vellosidades, en la mitigación y más rápida recuperación de los procesos diarreicos, y en la disminución de las alteraciones en la permeabilidad por endotoxinas.
Hay que considerar que la glutamina es bastante inestable, pudiéndose degradar en el intestino antes de su absorción. Existe la posibilidad de usar dipéptidos como L-alanil-glutamina o L-glicil-glutamina, aunque su coste es superior.
Conclusión
A nivel experimental se ha demostrado la importancia de la glutamina en el metabolismo de la mucosa intestinal, beneficiando su integridad y funcionalidad. Sin embargo su utilización práctica, especialmente en lechones, aún no está clara tanto en aspectos como el nivel de inclusión, tipo de molécula y en la consistencia de las mejoras sobre la salud intestinal.