Efecto de la utilización de maíz y soja con bajo contenido en ácido fítico y la suplementación con fitasa sobre la digestibilidad de los nutrientes y la excreción de fósforo en cerdos durante la fase de crecimiento
BE Hill, AL Sutton y BT Richert.2009. Journal of Animal Science. 87:1518-1527.
27-ago-2009 (hace 15 años 3 meses 26 días)El maíz y la soja son ingredientes ricos en fósforo (P) fítico (de promedio con un 68 y un 52% de P fítico respecto al P total, respectivamente), que es altamente indigestible por los animales monogástricos. La utilización de ingredientes con bajo contenido en ácido fítico (BAF) combinado con fitasa podría permitir una reducción de la cantidad de fósforo excretado. El objetivo del presente experimento fue combinar la reducción de ácido fítico en los ingredientes (maíz BAF, harina de soja BAF) junto con la adición de fitasa para maximizar la eficiencia de la digestión y absorción del fósforo y minimizar la excreción de fósforo.
Se utilizaron un total de cuarenta y ocho animales para evaluar los efectos de la utilización de maíz y harina de soja BAF y maíz y harina de soja con contenido normal de ácido fítico con o sin la inclusión de fitasa sobre la digestibilidad y la excreción de fósforo. Los animales fueron distribuidos en bloques de acuerdo con el peso vivo inicial y distribuidos aleatoriamente entre los 8 tratamientos experimentales de acuerdo a un diseño factorial 2x2x2 (6 animales/tratamiento). Los animales fueron alimentados dos veces al día (07:00 y 17:00 h) a un nivel de alimentación de 3 veces los requerimientos de EM de mantenimiento. La fitasa fue añadida a la dieta a razón de 510 unidades de fitasa/kg de pienso, y todas las dietas fueron formuladas para aportar un 0,39% de P total, 0,50% de Ca y un 1,0% de lisina sin suplementación de fósforo inorgánico. Los períodos experimentales consistieron en 7 días de adaptación a las jaulas de metabolismo y a los tratamientos experimentales, seguido de tres días de recogida total de heces y orina.
La materia seca total excretada, el porcentaje de materia seca en las heces y el porcentaje de materia seca digerida no fueron diferentes (P>0,53) entre tratamientos. La excreción fecal de P se vio reducida en los animales alimentados con las dietas que contenían maíz BAF respecto los alimentados con maíz normal (2,85 vs 3,24±0.119 g/g; P=0,024), para los animales alimentados con harina de soja BAF respecto los alimentados con soja normal (2,79 vs 3,30±0,119 g/d; P=0,007), para los animales suplementados con fitasa respecto a los no suplementados (2,80 vs 3,29±0,119 g/d; P=0,009) y para los cerdos alimentados con maíz BFA, harina de soja BFA y fitasa vs los alimentados con maíz y soja normales y sin fitasa (2,16 vs 3,70±0,237 g/d; P<0,001). La digestibilidad del P se vio incrementada en los animales alimentados con las dietas que contenían maíz BAF respecto los alimentados con maíz normal (48,4 vs 39,9±2,27%;P=0,012), par los animales suplementados con fitasa respecto los no suplementados (48,4 vs 39,9±2,27%;P=0,019), y para los animales alimentados con los ingredientes BAF + fitasas respecto los ingredientes normales sin fitasa (60,1 vs 34,1±4,5%;P<0,001). El tipo de maíz o soja utilizados no presentaron ningún efecto sobre la excreción de P soluble en agua (P>0,11). De todos modos los animales alimentados con las dietas que contenían fitasa tendieron a excretar menos fósforo total soluble en agua que los que no fueron suplementados con fitasa (1,99 vs 2,27±0,099 g/d;P<0,066).
Se puede concluir que utilizando cualquier combinación de maíz o harina de soja con reducción de ácido fítico junto a la suplementación de fitasa fue aditiva, mejoró significativamente la digestibilidad y redujo fuertemente la excreción de P, reduciendo los efectos potencialmente negativos de P contenido en los purines sobre el medioambiente.
Se utilizaron un total de cuarenta y ocho animales para evaluar los efectos de la utilización de maíz y harina de soja BAF y maíz y harina de soja con contenido normal de ácido fítico con o sin la inclusión de fitasa sobre la digestibilidad y la excreción de fósforo. Los animales fueron distribuidos en bloques de acuerdo con el peso vivo inicial y distribuidos aleatoriamente entre los 8 tratamientos experimentales de acuerdo a un diseño factorial 2x2x2 (6 animales/tratamiento). Los animales fueron alimentados dos veces al día (07:00 y 17:00 h) a un nivel de alimentación de 3 veces los requerimientos de EM de mantenimiento. La fitasa fue añadida a la dieta a razón de 510 unidades de fitasa/kg de pienso, y todas las dietas fueron formuladas para aportar un 0,39% de P total, 0,50% de Ca y un 1,0% de lisina sin suplementación de fósforo inorgánico. Los períodos experimentales consistieron en 7 días de adaptación a las jaulas de metabolismo y a los tratamientos experimentales, seguido de tres días de recogida total de heces y orina.
La materia seca total excretada, el porcentaje de materia seca en las heces y el porcentaje de materia seca digerida no fueron diferentes (P>0,53) entre tratamientos. La excreción fecal de P se vio reducida en los animales alimentados con las dietas que contenían maíz BAF respecto los alimentados con maíz normal (2,85 vs 3,24±0.119 g/g; P=0,024), para los animales alimentados con harina de soja BAF respecto los alimentados con soja normal (2,79 vs 3,30±0,119 g/d; P=0,007), para los animales suplementados con fitasa respecto a los no suplementados (2,80 vs 3,29±0,119 g/d; P=0,009) y para los cerdos alimentados con maíz BFA, harina de soja BFA y fitasa vs los alimentados con maíz y soja normales y sin fitasa (2,16 vs 3,70±0,237 g/d; P<0,001). La digestibilidad del P se vio incrementada en los animales alimentados con las dietas que contenían maíz BAF respecto los alimentados con maíz normal (48,4 vs 39,9±2,27%;P=0,012), par los animales suplementados con fitasa respecto los no suplementados (48,4 vs 39,9±2,27%;P=0,019), y para los animales alimentados con los ingredientes BAF + fitasas respecto los ingredientes normales sin fitasa (60,1 vs 34,1±4,5%;P<0,001). El tipo de maíz o soja utilizados no presentaron ningún efecto sobre la excreción de P soluble en agua (P>0,11). De todos modos los animales alimentados con las dietas que contenían fitasa tendieron a excretar menos fósforo total soluble en agua que los que no fueron suplementados con fitasa (1,99 vs 2,27±0,099 g/d;P<0,066).
Se puede concluir que utilizando cualquier combinación de maíz o harina de soja con reducción de ácido fítico junto a la suplementación de fitasa fue aditiva, mejoró significativamente la digestibilidad y redujo fuertemente la excreción de P, reduciendo los efectos potencialmente negativos de P contenido en los purines sobre el medioambiente.