Ingestión voluntaria de pienso y estructura intestinal después del destete

El destete es un acontecimiento muy estresante para el lechón joven. Esto es debido a que a los cerdos se les somete a numerosos cambios, como mezclarlos, moverlos y cambiarlos de la leche de las cerdas a una dieta seca y sólida. No es ninguna sorpresa que el destete, especialmente a edades menores de 21-24 días, causa un “retraso post-destete” que se caracteriza por baja ingestión voluntaria de pienso y bajo (o negativo) índice de ganancia de peso, aumento de morbilidad, y un mayor riesgo de enfermedad gastrointestinal que podría aumentar la mortalidad. Hay también cambios histológicos marcados que ocurren inmediatamente después del destete. La Figura 1 muestra la diferencia en morfología, la atrofia de las vellosidades y la hiperplasia de criptas, entre un lechón no destetado (mamando de la cerda) y un cerdo destetado tres días antes.

La ausencia de nutrientes en el intestino delgado después del destete tiene efectos marcados sobre el ratio de diferenciación celular y en la renovación celular en el intestino delgado (y grueso). Esto es debido a que es necesaria la ingestión oral de alimento para el mantenimiento estructural y funcional de la mucosa intestinal. El principal efecto de la privación de nutrientes, y posterior re-alimentación, es un aumento y disminución, respectivamente, de la duración del tiempo del ciclo celular, o Tc, en las criptas de Lieberkühn, aunque también se debe en parte al tipo y cantidad de dieta consumida. En estudios recientes se ha demostrado que la baja ingestión de pienso después del destete aumenta la permeabilidad (o escape) y promueve las respuestas inflamatorias en el intestino delgado. Estos hechos pueden exacerbar más el retraso post-destete. Reanudando la alimentación tan solo 9-12 horas después del destete, en cualquier caso, se produce un aumento general en la proliferación celular en las criptas que estimula la migración celular y la diferenciación celular en la dirección adecuada a lo largo de las vellosidades, lo que produce un aumento general de la capacidad digestiva y de absorción. Esto puede tardar hasta 10 días post-destete, dependiendo de la edad del cerdo, de la cantidad de pienso consumido, y del tiempo durante el cual el intestino ha estado atrofiado.

En otros estudios se ha comprobado que tanto el tipo como la cantidad de pienso consumido por el cerdo después del destete tienen una gran influencia sobre la estructura y función del intestino. Por tanto, influyen directamente en la ganancia de peso en este periodo crucial. Las dietas líquidas de leche, o dietas en gránulo (seco) suministradas en forma de papilla, tienden a promover una ingestión más rápida de pienso después del destete proporcionando una mejor estructura intestinal, en comparación con una dieta seca en gránulo. Incluso existe una relación directa entre la ingestión de una dieta seca en gránulo y la estructura intestinal, lo que enfatiza aun más la importancia de maximizar la ingestión de pienso, si se da este tipo de dieta, tan pronto como sea posible después del destete.

El primer paso para maximizar la ingestión de pienso después del destete es formular dietas adecuadas, junto con un programa adecuado de alimentación por fases unido a presupuestos de piensos, que se ajusten al desarrollo del tracto digestivo en términos de actividad enzimática digestiva y capacidad de absorción post-destete. El segundo paso es corregir el manejo y la presentación del pienso. El pienso se debe suministrar a intervalos regulares durante los primeros pocos días después del destete, para estimular a los cerdos a que coman tan pronto como sea posible. Algunos ganaderos utilizan alfombrillas para facilitar este proceso. El espacio de comedero debe ser adecuado para todos los lechones del corral, y es deseable que los cerdos se puedan ver entre ellos cuando comen. Siguiendo estos principios básicos se debe asegurar que se minimizan los efectos negativos que tiene el proceso de destete sobre la ingestión voluntaria de pienso después del destete, y que los lechones empiezan a consumir sus dietas post-destete tan pronto como sea posible para que el coste por unidad de ganancia de peso se reduzca.