La naturaleza es sabia III: Las cerdas no sólo hacen lechones, también hacen leche suficiente para criarlos

Yaiza Ara RipaldaJosep Casanovas
18-oct-2016 (hace 8 años 2 meses 8 días)

Esta es la tercera entrega de la saga que empezó a publicarse en diciembre de 2012.

En los dos primeros artículos se comentaba la necesidad de buscar el mejor día de destete para conseguir las mejores cubriciones y la mejor atención posible de los partos. Dado que la situación productiva ha cambiado, y mucho, debido a las mejoras en: sanidad, instalaciones, manejo, alimentación y genética. El cambio más importante de todos, el que condiciona más la producción, es la duración de la gestación de las cerdas (más de 115 días en las genéticas modernas).

Actualmente nos encontramos con cerdas que paren muchos más lechones que antes, lechones que hay que poder criar. No hay que olvidar que además de lechones, la cerda tiene una elevada capacidad para producir leche, capacidad que debemos aprovechar al máximo.

Actualmente hay cerdas que paren muchos más lechon 1

Imagen 1. Actualmente hay cerdas que paren muchos más lechones y mucho más viables que antes.

 

La necesidad de leche es tan grande que se están desarrollando diferentes sistemas para poder ofrecer leche artificial a los lechones como alternativa.

¿Son necesarios estos sistemas? ¿Son realmente capaces, las cerdas modernas, de producir toda la leche que necesitan sus lechones?

Las altísimas prolificidades y el manejo cada vez mejor me han demostrado de forma práctica que una cerda con 14 tetas puede "subir" a 16 lechones sin problemas.

¿Qué quiere decir sin problemas? Sin que se desigualen, con buen peso al destete, sin diferencias con otros lechones que han tenido "su" propia teta durante toda la lactación.

Siempre habíamos tenido claro, que cada lechón tiene su teta, que los primeros días de vida se instaura una jerarquía entre hermanos que hace que cada lechón se asigne la mejor teta que puede dentro de sus posibilidades.

Ahora sabemos que esto es verdad sólo a medias. Esto es verdad cuando hay más tetas que lechones. Pero cuando hay más lechones que tetas, y todos ellos son fuertes y viables, las tetas se comparten.

Esto permite un aprovechamiento completo de toda la leche disponible. El vaciado de las tetas es completo y esto estimula una mayor producción lechera.

Una vez convencidos de que las tetas se comparten, el siguiente paso es plantearse la posibilidad de levantar los separadores de la maternidad, permitiendo a los lechones de las diferentes camadas mezclarse, permitiéndoles socializarse.

Sala de partos en que se han quitado las separacio 1

Imagen 2. Sala de partos en que se han quitado las separaciones entre parideras.

 

La primera ventaja es evidente, la zona de reposo se aprovecha mucho mejor.

Pero, ¿hay otras?, ¿realmente se aprovecha más la leche? ¿Se puede llegar al límite que la cerda es capaz de producir?

En el trabajo de fin de grado de Yaiza Ara se puede demostrar.

Se pesaron los lechones, de forma individual, de 36 camadas. La mitad de cada sala fue socializada de dos en dos quitando la barrera entre ambas camadas.

Se realizaron tres pesadas para cada lechón;

Se procedió a la socialización de lechones con una vida media de 11 días.

Eliminación de las separaciones entre parideras 1

Hay diferencias significativas entre los pesos de los lechones que fueron socializados y los que no lo fueron (Tabla 1).

Tabla 1. Medias mínimo cuadráticas (±SE) de los pesos vivos de los lechones en función del tratamiento (socializados / control).

  Socializados Control P
Peso 1 (procesado) 2,14 (±0,03) 1,93 (±0,03) 0,01
Peso 2 (destete) 7,41 (±0,1) 7,11 (±0,1) 0,03
Peso 3 (4 semanas postdestete) 13,23 (±0,23) 12 (±0,24) 0,05

Los lechones además de crecer más cuando se socializan son algo más homogéneos como se puede ver al comparar los coeficientes de variación de los pesos (Tabla 2).

Tabla 2. Coeficinete de la variación (%) de los pesos de los lechones de las camadas socializadas y no socializadas.

  Socializados No socializados
Peso 1 (procesado) 23,66 25,02
Peso 2 (destete) 19,32 20,86
Peso 3 (4 semanas postdestete) 24,98 26,95

Una de las dudas que se presentó en el momento de realizar la prueba, fue escoger el momento adecuado para socializar a las camadas. En la naturaleza suele ocurrir a partir de los 10 días. Se pudo observar que los resultados obtenidos después del destete son mejores cuando la socialización es tardía, más allá de los 10 días de vida (Tabla 3).

Tabla 3. Medias (±SE) de los pesos vivos en función de la edad de socialización.

  ESOC ≤ 10 ESOC > 10 P
Peso 2 (destete) 7,23 (±0,08) 7,39 (±0,13) NS
Peso 3 (4 semanas postdestete) 14,38 (±0,08) 15,23 (±0,21) ≤0,001

A pesar de las limitaciones que pueda tener el trabajo (tamaño de muestra, pesos al inicio de la prueba…) parece claro que socializar en la maternidad supone ventajas para los lechones, tanto en la maternidad como en la primera fase de crecimiento.

La puerta ya está abierta, hay que continuar probando para intentar valorar el momento óptimo de socialización, número se camadas implicadas, etc. y de esta forma conseguir aprovechar al maximo un bien tan preciado en nuestros sistemas productivos como es la leche de las cerdas.