Estrategias para controlar la variabilidad de peso del lechón en transición (1/2): maternidad, segregación de animales, confort ambiental

Sergi López-VergéDavid Solà-OriolJosep Gasa
26-ene-2016 (hace 8 años 11 meses)

En un artículo previo se constató la necesidad de controlar la dispersión de peso vivo (PV) generada a lo largo del ciclo productivo, así como las implicaciones más importantes registradas al final del engorde y que afectan la eficiencia productiva.

En dos artículos consecutivos trataremos estrategias estrictamente productivas y de manejo, destinadas a reducir la variabilidad del PV de los lechones durante y a la salida de la transición. En este primer artículo, se abordan cuestiones como la segregación de animales, y el confort ambiental. En el siguiente abordaremos la alimentación y el espacio de comedero.

No se debe olvidar la importancia de los aspectos sanitarios aunque no se incluyen en estos artículos. Por una parte, seguir las normas de bioseguridad externa e interna y de otra practicar un vacío sanitario estricto son aspectos básicos para controlar la aparición de patógenos y/o la recirculación de los ya existentes. Además, el sistema de producción empleado juega también un papel muy importante, pues no es lo mismo una transición de un ciclo cerrado que una S2 de un "tres fases"; el control sanitario se suele simplificar o complicar en este último caso dependiendo del número de granjas origen y homogeneidad sanitaria de los lechones.

 

La importancia de realizar un buen manejo en maternidad

Un buen peso y homogeneidad de los lechones en el momento del destete, o lo que es lo mismo a la entrada a la transición, es primordial al ser el punto de partida. Lo acontecido durante la lactación, en la maternidad, es de gran relevancia y entre los posibles factores a tener en cuenta desde muy temprana edad,destacan:

 

Lechones en lactación artificial

Figura 1. Lechones en lactación artificial. Foto cedida por Antonio Caballero.

 

El interés de segregar los lechones por su peso al destete

Segregar los lechones al destete de acuerdo a su PV persigue fundamentalmente reducir la variabilidad de PV dentro de los grupos de transición, esperando mantenerla más o menos constante. No obstante, y de acuerdo con resultados propios (Jordà et al., 2015), la reducción del coeficiente de variación (CV) del lote que se consigue al inicio de la transición, incrementa posteriormente hasta valores similares a los que se obtendrían sin segregar los animales. Así, en la figura 2, se compara la evolución del CV a lo largo de la transición en dos grupos de animales: uno en el que se segregaron los lechones por peso al destete (convencional) y otro en el que se implementó una estrategia de socialización temprana y se destetaron camadas enteras (social) no mezclándose animales tras el destete. No disponemos del control negativo en este ensayo (no socializados y no segregados) pero otros estudios sugieren que el efecto sería muy similar (presentarían al final un CV similar al tratamiento convencional).

Variabilidad en transición (28-64 días)

Variabilidad en transición (28-64 días)

Figura 2. A pesar del esfuerzo de segregar los lechones al inicio de la transición, el CV tiende a incrementarse hasta niveles parecidos a lechones en los que tal segregación no ha tenido lugar (Jordà et. al, 2015).

 

Disponer de un ambiente y confort adecuados

Ejercer un buen control de las condiciones ambientales y la densidad de animales en los corrales es fundamental (figuras 3 y 4). Un ejemplo típico se da en las granjas que deciden cambiar la genética clásica a cerda hiperprolífica. Si no se redimensionan adecuadamente los corrales de destete/transición, la densidad aumenta perjudicando los objetivos productivos y afectando, además, la homogeneidad de los animales del lote. De igual modo variaciones importantes en el número de cerdas destetadas por semana pueden conducirnos a problemas puntuales similares.

Sala de transición con un buen nivel de confort

Figura 3. Sala de transición con un buen nivel de confort (foto cedida por Laia Blavi).

Ejemplo de corrales de transición con una óptima densidad

Figura 4. Ejemplo de corrales de transición con una óptima densidad (foto cedida por Antonio Caballero).

Algunas indicaciones para asegurar un buen ambiente y confort a los animales, y que contribuirían a la homogeneidad de PV del lote pueden ser:

Como conclusión podemos decir que aunque la dispersión que nos "venga" de maternidad es determinante en la dispersión final en la fase de cebo, en transición podemos tomar medidas de manejo o relacionadas con las condiciones de producción que permitirían corregir en parte esta dispersión.