DEP en primera línea
La diarrea epidémica porcina (DEP) se ha ido abriendo camino dentro de la industria porcina mundial en los últimos 5 años y ahora está considerada como una de las cinco principales amenazas sanitarias y de manejo para la viabilidad de las empresas ganaderas porcinas. La DEP está causada por un virus RNA monocatenario (ssRNA) envuelto, de la familia de los Coronavirus. Como la mayoría de virus ssRNA, tiene mutaciones de manera frecuente, lo que ha provocado la aparición de una serie de brotes de DEP con nuevas cepas implicadas.
La situación actual se remonta a los brotes de DEP surgidos en Corea en 1992. Durante la siguiente década aparecieron brotes en todo el este asiático que estaban relacionados con estas cepas coreanas. Por ejemplo, los brotes graves de DEP comenzaron en Filipinas en 2004, tras la importación de cerdos reproductores jóvenes desde Corea. El estatus de estos cerdos respecto a DEP no se comprobó antes de importarlos.
Otro grupo de nuevas cepas DEP surgieron en la República Popular China en 2008, dando lugar a brotes graves y prolongados en toda China. Estos brotes se extendieron más tarde a través de las fronteras a las grandes industrias porcinas de Vietnam y Tailandia. La secuenciación de ácidos nucleicos indica que básicamente existen dos grupos dentro de las cepas chinas actuales, descritas normalmente como cepas chinas "del norte" y "del sur". En 2013, la cepa china del norte estuvo implicada en el inicio de los importantes brotes de DEP en EE.UU. Esta transferencia no intencionada de un importante patógeno porcino desde un continente a otro causó una fuerte preocupación, ya que no existía una forma de transferencia clara, como el movimiento de cerdos.
La situación actual de DEP consiste en una aparición continua de brotes, de moderados a graves, en muchas granjas de cerdos en toda Asia, EE.UU. y en otras zonas, tanto en granjas no expuestas como en aquellas que han sufrido episodios anteriores.
Episodio típico de DEP actual
En el sur de China una nave de 180 reproductoras, con un buen manejo, vacunó a las cerdas con una variedad de vacunas para reproductoras, que incluía dos dosis de una vacuna comercial con un virus DEP vivo modificado derivado de una cepa coreana. En marzo de 2015, la granja experimentó un brote de diarrea explosiva entre lechones recién nacidos en camadas de varias cerdas (figura 1). Las camadas afectadas fueron repartidas entre otros partos normales en la sala de partos (figura 2). El virus DEP se confirmó mediante análisis PCR de material intestinal.
Figura 1. Diarrea amarillenta acuosa severa y deshidratación en lechones afectados por DEP.
Figura 2. Diarrea severa y deshidratación en lechones afectados por DEP (izquierda), en comparación con la camada normal adyacente.
El ganadero instauró fuertes medidas de desinfección alrededor de las zonas de reproducción y la recogida de contenido y material intestinal de lechones afectados. Utilizó este contenido fresco para preparar un “feedback” con virus vivo autógeno diluido en leche y antibióticos para administrar oralmente una dosis al resto de cerdos criados en la granja. Durante 2 semanas se produjo un brote que afectó al 10% de las camadas, pero a partir de entonces las siguientes camadas fueron normales.
Los brotes de DEP actuales tienden a recurrir en granjas afectadas con anterioridad
La experiencia actual de muchas granjas porcinas en Asia y otros lugares es que tras un brote inicial y típico de DEP, es común la recurrencia. Este episodio recurrente de DEP “endémica” generalmente tiene lugar de 4 a 12 meses más tarde, presumiblemente debido a la disminución de la inmunidad en la granja.
Se desconoce la causa de esta característica de los brotes de la cepa actual de DEP. Es posible que las nuevas cepas chinas tengan algún tipo patogenicidad o capacidad de transmisión mejorada a causa de las mutaciones. Los estudios de inoculación experimental en lechones neonatos no expuestos mediante desafíos orales con estas cepas DEP nuevas han mostrado una fuerte virulencia con infección epitelial y atrofia de las vellosidades. Las pruebas de campo también sugieren que muchas granjas con brotes recurrentes de DEP tienen infecciones concurrentes con cepas patógenas e inmunosupresivas de PRRS y/o de PPC, que pueden actuar restringiendo la capacidad del cerdo para desarrollar una inmunidad total frente a DEP. Encuestas recientes en granjas porcinas del este asiático indican que más de un tercio tienen infecciones activas con ambos virus de PRRS y PPC actuando a la vez.
Respuestas de la industria porcina
Se ha destinado un esfuerzo considerable en investigación para desarrollar información útil sobre las cepas de DEP actuales. En cuanto a las infecciones de lechones, el pico de eliminación fecal es a los 6 días p.i., pero algunos cerdos (10 %) siguen eliminando a los 28 días p.i. La supervivencia en el ambiente de las cepas actuales en heces y agua es de unos 7 días, pero con una supervivencia en piensos, fómites y purines de 14 a 28 días. Además de los brotes recurrentes en granjas endémicas, la transmisión local entre granjas en cualquier región sigue siendo en gran parte debida a la llegada de cerdos, verracos, equipos y camiones contaminados procedentes de granjas infectadas.
La forma más útil de control durante un brote sigue siendo la recogida y el uso de un "feedback" de material intestinal con virus DEP fresco en animales reproductores, especialmente en cerdas gestantes. El objetivo de este procedimiento es la exposición rápida de toda la granja a la DEP y la aparición rápida de inmunidad con niveles de anticuerpos maternales específicos y elevados.
También ha habido un gran interés en el desarrollo de vacunas comerciales frente a la DEP, con diversos productos disponibles procedentes de diferentes países. Estas vacunas son normalmente inyectadas al final de la gestación. El objetivo general es también elevar los anticuerpos maternales frente al virus DEP a niveles compatibles con la prevención de la infección en lechones lactantes de cara al desafío con DEP.
Empresas farmacéuticas coreanas y japonesas desarrollaron vacunas de cepas vivas atenuadas modificadas adaptando cepas coreanas relacionadas con los brotes anteriores al cultivo celular. Empresas farmacéuticas chinas y estadounidenses están desarrollando otras vacunas, tanto muertas como vivas modificadas, a partir de las cepas chinas nuevas.
Como se indica en este caso, la experiencia general de los ganaderos que utilizan muchas de las vacunas DEP comerciales disponibles en la actualidad es que su uso rara vez ha sido claramente beneficioso, con muchos casos de DEP en cerdos vacunados. Este fracaso general en la eficacia de la vacuna DEP actual puede ser debido a un gran número de razones, tales como las diferencias entre las cepas vacunales y las de campo, la interferencia en el desarrollo de la inmunidad protectora frente a DEP por la actividad inmunosupresora de PPC y PRRS, o la inestabilidad estructural en el coronavirus DEP y su relación con la inmunidad mediada por células protectoras.
Por tanto, cualquier granja de cerdos que contemple el uso de vacunas debe establecer que el antígeno de la vacuna sea eficaz contra la cepa coreana y las cepas nuevas. Las empresas farmacéuticas que ofrecen vacunas comerciales frente a DEP tienen que ser capaces de demostrar con datos claros, tanto de campo como experimentales, que comparen el resultado de la exposición al desafío con DEP en lechones de cerdas vacunadas o no vacunadas. ¡Esperemos que los lechones procedentes de cerdas vacunadas tengan menor probabilidad de desarrollar diarrea!