Peste porcina africana. Reconocer la enfermedad en campo

Lina Mur GilJosé Manuel Sánchez-Vizcaíno
30-mar-2012 (hace 12 años 8 meses 22 días)

Hace poco advertíamos del actual riesgo que supone la peste porcina africana (PPA) para la Unión Europea (UE) y cómo la principal medida que debemos tomar para evitar su entrada es estar prevenidos e informados al respecto. Con este objetivo hemos elaborado el siguiente resumen que esperamos sirva para aclarar algunos conceptos prácticos sobre la PPA, cómo reconocerla y actuar en el campo frente a ella.

¿Cómo se presenta la PPA?

La PPA es una enfermedad multisistémica clasificada dentro del grupo de las enfermedades hemorrágicas debido a sus síntomas hemorrágicos presentes en las formas aguda e hiperaguda de la enfermedad.

Actualmente, la PPA se encuentra únicamente presente en el continente africano, la isla italiana de Cerdeña, Rusia y países caucásicos. Cerdeña, único territorio donde la PPA permanece endémica desde su introducción en 1978, afectando a cerdo doméstico europeo y jabalí, no ha provocado brotes en otros territorios, a excepción de un único brote en el norte de Italia en los años 80. Por el contrario, África y Rusia se consideran un potencial riesgo para la introducción de PPA en la UE. En los últimos años se ha producido un incremento de la circulación viral de PPA en el continente africano, habiendo más virus que nunca en el continente y por lo tanto, más animales y productos contaminados. Por su parte, en Rusia y países colindantes afectados, la enfermedad permanece presente de 2007 en su forma aguda, causando grandes pérdidas económicas en una situación fuera de control.

Teniendo en cuenta los cuadros causados en las regiones actualmente afectadas por la enfermedad, así como la alta susceptibilidad del cerdo europeo a la PPA, la forma más previsible de aparición de la enfermedad en la UE sería una forma aguda de PPA por la introducción del virus a partir de fómites, comercio ilegal o consumo de desperdicios contaminados procedentes de África o el Este de Europa.

Cerdo afectado por PPA con cianosis en las orejas.

Fig. 1: Cerdo afectado por PPA con cianosis en las orejas.

Posibles formas clínicas de la enfermedad

En caso de presentarse la PPA de una forma hiperaguda, se produce la muerte de los animales en pocos días (menos de una semana) sin síntomas aparentes más allá de una fiebre elevada y el consiguiente amontonamiento característico de los cerdos en los corrales.

Imagen característica de bazo hemorrágico aumentado de tamaño en un cerdo afectado por PPA.

Fig.2: Imagen característica de bazo hemorrágico aumentado de tamaño en un cerdo afectado por PPA.

En la forma aguda de la enfermedad los animales presentan los típicos síntomas característicos de PPA y de otras hemorrágicas, con alteraciones cutáneas (exantemas en las extremidades, vientre, jeta y pabellón auricular), fiebre, postración, posibles descargas hemorrágicas (nasales, diarreas) y dificultades respiratorias en las fases finales debido al edema pulmonar. Los animales mueren a partir de los días 5-9 post-infección y en la necropsia podemos observar como lesiones más significativas las hemorragias y congestiones en el aparato digestivo y ganglios adyacentes; hemorragias en bazo, frecuentemente aumentado de tamaño, cruzando la cavidad abdominal presentando un color oscuro y textura friable. En los riñones se pueden observar petequias en la corteza renal, hemorragias de distinto grado en los ganglios linfáticos, especialmente los gastrohepáticos, renales y mandibulares y presencia de edema pulmonar.

Ganglios gastrohepáticos totalmente hemorrágicos en la cavidad abdominal de un cerdo afectado por PPA.

Fig.3: Ganglios gastrohepáticos totalmente hemorrágicos en la cavidad abdominal de un cerdo afectado por PPA.

En cursos menos agudos de enfermedad los animales presentan síntomas menos claros, produciéndose su muerte a partir del día 20 pi, frecuentemente debido a complicaciones de la trombocitopenia causada por el virus. En estos animales las lesiones hemorrágicas son más pronunciadas en ganglios, pudiéndose observar hemorragias y alteraciones en otros órganos como pulmón, riñón, corazón y estómago.

Presencia de petequias en la superficie renal de un cerdo afectado con PPA.

Fig. 4: Presencia de petequias en la superficie renal de un cerdo afectado con PPA.

¿Cómo está presentándose en Rusia?

El cuadro clínico visto hasta la fecha de PPA en Rusia y los países colindantes, es un cuadro agudo típico de enfermedad. Los animales mueren entre los 7 y 15 días post-infección observándose síntomas en ellos de fiebre, amontonamiento por frío y las lesiones anteriormente descritas. En caso de que este mismo aislado, perteneciente al genotipo II, entrase en cualquier país europeo, los síntomas esperados en la población porcina serían los característicos de la enfermedad en su curso agudo, por lo que se espera su rápido reconocimiento en campo.

¿Qué hacer en caso de sospecha?

En este sentido, resulta fundamental realizar un correcto diagnóstico diferencial con otras enfermedades hemorrágicas que pueden cursar con síntomas parecidos como son la PPC, el mal rojo causado por erisipela porcina, salmonelosis aguda, enfermedad de Aujezsky por los abortos o síndrome de dermatitis-nefropatía. Es importante recordar la semejanza de algunas de estas enfermedades en el campo con los primeros síntomas de PPA. Por lo que en caso de hallarse algún animal sospechoso se recomienda, en primer lugar la realización de una necropsia para estudiar las lesiones, cuidando especialmente la desinfección y adecuado desecho de material y calzado empleado, para evitar posibles difusiones del VPPA.

Las muestras que deben ser tomadas para la realización del diagnóstico laboratorial deben incluir sangre y suero del animal sospechoso, así como muestras de bazo y ganglios afectados preferiblemente. También se pueden remitir muestras de pulmón, hígado, riñón u otros órganos si se considera oportuno.
La PPA es una enfermedad grave que puede ocasionar grandes pérdidas al sector. Sin embargo, si se detecta a tiempo, se puede limitar en gran medida las repercusiones negativas. Para ello es fundamental conocer los síntomas clínicos de la enfermedad, especialmente en su forma aguda presente actualmente en Rusia, por lo tanto la que con mayor probabilidad se daría en caso de introducción en la UE. Del mismo modo, conviene recordar la importancia de incluir la PPA en el diagnóstico diferencial de otras enfermedades hemorrágicas y la confirmación de su diagnóstico mediante técnicas laboratoriales.