Escrito el 02 de marzo de 2011
10-mar-2011 (hace 13 años 8 meses 15 días)
Ya ha pasado un mes desde mi último comentario y las cosas siguen igual o más etéreas que nunca.
La bajada prevista de los cereales estuvo a punto de producirse hace unos 10 días, con bajadas significativas tanto en Chicago (Cbot), como en el Liffe o el Matif. Pero los mercados consiguieron frenar la bajada respaldados tanto por los conflictos que se propagan por los países árabes como por otros problemas en países emergentes, lo que propicia, entre otras cosas, la subida del petróleo.
Las espadas siguen en alto, los importadores siguen contándonos que la reposición está cara pero al mismo tiempo los inmediatos se ofrecen con descuentos significativos, lo que provoca que el mensaje alcista no acabe de cuajar en el comprador. Por otro lado estamos en la época del año de menor producción de pienso en el hemisferio norte, lo que no ayuda nada a la toma de decisiones. Porque quién más, quien menos, con las compras de febrero y marzo y algo de nacional o francés, tiene cubiertas las necesidades de abril.
Para terminar de liarla tenemos cebada para entregas abril / mayo ofertada a niveles de 230-235 €/Tm sobre Lérida y a 232-237€/Tm sobre zona Barcelona. Esta oferta proviene de las subastas europeas y por eso llega a precios tan atractivos.
Bruselas por fin se ha decidido a eliminar el levy de 12 €/Tm pero de momento su efecto en los precios ha sido más bien nulo.
Otro factor a tener en cuenta es la subida del precio del petróleo que como es lógico intentarán se materialice también en una subida de fletes y transporte en general.
Como colofón tenemos las divisas siguiendo su baile particular, al compás que marcan las noticias económicas, ya sean conflictos árabes, problemas varios o la indefinición del yuan chino.
A todo esto cada vez queda menos tiempo para llegar a la nueva cosecha y eso debería pesar sobre los stocks finales pero de momento no se nota. Hablando de stocks finales, según el International Grains Council llegaremos a final de cosecha con unas existencias de trigo de 18 millones de Tm. Dicho de otro modo, con una cobertura del 28% aprox. del consumo, lo que es un porcentaje suficiente y cómodo. En cuanto al maíz, los stocks a final de campaña se sitúan en 119 millones de Tm lo que supone una cobertura del 14%, un porcentaje bastante bajo. A pesar de ello, por lo menos en Europa, seguimos teniendo más oferta y precios más competitivos de maíz que no de trigo. Resumiendo, deberemos seguir velando las armas a la espera que el mercado se defina.
Si el complejo de cereales está como está…el de la proteína ni lo cuento. Se sigue sin tomar decisiones ni a medio ni a largo plazo: seguimos con coberturas cortas de un mes y poco más. La verdad sea dicha, las ofertas para posiciones más largas están a precios similares a los entregas inmediatas, lo que no invita a tomar decisiones. Es por eso que nadie se atreve a cubrir plazos largos a niveles de 330 €/Tm y eso que estamos a las puertas de nueva cosecha, en la que hay una producción récord pero también un consumo récord, lo que no facilita que haya movimientos significativos. La subida del petróleo también mantiene las expectativas de máxima producción de biodiesel y eso también contribuye a que nadie se mueva demasiado, por aquello del que se mueve no sale en la foto…o lo que es peor, sale movido.
Por otro lado la harina de colza después de la parada invernal empieza a moverse y ya se ofrece cosecha nueva (a partir del mes de agosto) a niveles de 215- 210 €/Tm sobre almacén puerto. De momento aún no parecen precios muy atractivos, pero con el aumento de la producción prevista para Europa, los precios deberían seguir cediendo, por lo que podríamos tener otra fuente de proteína a precios competitivos.
Para terminar el girasol de alta proteína (entre 34-36 %) sigue, o mejor dicho, debería seguir los pasos de la colza.
Jordi Beascoechea
Subministradora de Cereals SL