Escrito el 22 de julio de 2010
06-ago-2010 (hace 14 años 3 meses 16 días)
El mes de julio se ha presentado con un aumento de las temperaturas considerable en todo el país, y este recalentamiento también se ha instalado en el mercado. Por eso, y para no repetirme después de mi último artículo (básicamente la situación esta igual pero con los precios bastante más caros) he pensado en hacer un cambio de tercio para explicar, o mejor dicho, intentar descifrar lo que para muchos es una gran incógnita: el cálculo del precio de la harina de soja (precio flat).
Todos hemos oído hablar de los futuros, la base, los spreads… ahora toca desentrañar qué es cada ingrediente y, por supuesto, como se combinan para dar el precio de la soja.
Para empezar, vamos a presentar la ecuación a partir de la cual se calcula el precio, por favor que nadie se asuste:
Precio harina de soja (precio flat) = (futuro x factor) + base
El futuro es una obligación de compra o venta de una determinada mercancía (commodity). Se entiende como la proyección de un precio en base a unas expectativas de los factores que le pueden afectar (climatología, intenciones de compra, intenciones de venta, estimaciones de consumo, etc.). Los futuros cotizan en el mercado de Chicago (Chicago Board of Trade), que es un mercado organizado que estandariza la compra de mercancías, en el caso que nos ocupa de la harina de soja. Que sean “instrumentos estandarizados” simplemente quiere decir que los futuros se negocian en múltiplos de contratos, siendo un contrato de soja 99,97 toneladas cortas (short ton) (el equivalente son 90,70 Tm).
En sus inicios este tipo de mercados se gestaron para limitar el riesgo. Por un lado el agricultor se aseguraba el precio de la cosecha y se desentendía de los riesgos climáticos, de plagas y demás sobresaltos. Por otro lado, el comprador se aseguraba un precio de mercancía.
El spread es la diferencia de precios de un mes a otro (también puede ser entre dos mercados de futuros relacionados, pero éste no es el tema que nos ocupa). Por lo tanto, antes del día 14 del mes, momento en que los futuros dejan de cotizar, los vendedores de bases de harina de soja realizan el spread, que se sumará o restará al futuro en función de la tendencia del mercado ese momento. Dependiendo del vendedor, los spreads se hacen un día u otro, pero siempre es un día más o menos fijo. Por ejemplo, tenemos un futuro agosto de harina de soja, estando a día 3 de agosto, el vendedor nos comunica que va a realizar el spread, con el cierre del mercado del día 3 de agosto tenemos la siguiente situación:
Futuro agosto: 299,30 dólar/short ton
Futuro septiembre: 300,80 dólar/short ton
El spread entonces es 1,5 dólar/short ton. A partir del cierre del dia 3 de agosto deberemos calcular el precio sobre futuro septiembre sumándole este diferencial (spreads) de 1,5 dólar/short ton.
El factor es una operación matemática para pasar el precio de dólar/tonelada corta a euros/Tm. Se calcula: factor = (dólar/euro x 1,1711) + 0,03.
Sólo hay una manera de entenderlo y es con ejemplos.
La cotización euro/dólar hoy es 1,2807. Buscamos la inversa dólar/euro que será 0,7808 (1 / 1,2807). Por lo tanto el factor es:
Factor = (0,7808 x 1,171) + 0,03 = 0,944
Actualmente lo más común es no redondear el tercer decimal.
La base es la diferencia de precio de una mercancía entre el precio local al contado y el precio del futuro, de ahí que pueda ser positiva o negativa. Tiene en consideración la inclusión de conceptos como el flete, y otros costes. Si las bases son negativas en España simplemente explica el hecho que el precio en origen es mayor que el precio en el mercado de Chicago (siempre sumando, eso sí, los gastos de transporte, financiación y almacenaje). Este cálculo se hace siempre en referencia a la harina de soja de alta proteína, luego hay que pasarlo a baja proteína.
Bueno, espero no haberles aburrido mucho, como despedida me gustaría comentar un pequeño detalle, a la hora de realizar las compras la mayor preocupación parece ser comprar la base un euro más barata que el vecino. Deberíamos (y digo deberíamos, con lo cual me incluyo) intentar cambiar la perspectiva, lo más importante es acertar la fijación del dólar y el futuro (o intentar no equivocarse demasiado), que nos pueden dar una ventaja (o desventaja) competitiva. Los grandes diferenciales en el precio son más consecuencia de estos dos factores, no de la compra de la base un euro arriba o abajo.
Dicho esto, buenas vacaciones a todos.
Jordi Beascoechea Subministradora de Cereals SL |