Eliminación del virus PRRS en 5 granjas porcinas mediante un procedimiento

Scott A. Dee
19-jun-1999 (hace 25 años 6 meses 1 días)

Desde 1993, el control del Síndrome Reproductor y Respiratorio Porcino (PRRS) ha sido una experiencia frustrante. Las características del virus PRRS, incluida su capacidad para mutar, recombinarse, iniciar infecciones persistentes y dar lugar a una viremia prolongada han limitado la eficacia de estrategias como la Despoblación de Lechoneras y desarrollo de cerdas primíparas. Debido a la capacidad de inducir infecciones transplacentarias del virus PRRS, o de difundirse durante la lactación a través de saliva, leche o calostro, la producción de lechones no infectados mediante el procedimiento de Destete Precoz Segregado y producción en Múltiples Fases ha sido poco consistente. Por otra parte, el uso de vacunas comerciales, tanto las vivas modificadas como las muertas, ha originado diversas cuestiones de seguridad y eficacia a las que aún no se ha dado respuesta. Por esta razón se comenzó un estudio para evaluar la viabilidad de la erradicación del virus PRRS mediante la técnica de "análisis y eliminación".

Los datos preliminares indican que el proceso de "análisis y eliminación" (Test and Removal, T&R) es una estrategia eficaz para la detección y eliminación de cerdos reproductores con infección persistente, evitando la transmisión vertical y la producción de crías susceptibles. Se ha aplicado el método T&R para la eliminación del virus de la enfermedad de Aujeszky y de Actinobacillus pleuropneumoniae. El principio de T&R consiste en obtener sueros de todas las hembras reproductoras y evaluar las muestras usando un test ELISA para la detección de anticuerpos frente al virus PRRS, así como la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) para la detección del ácido nucleico del virus. Los animales con un resultado ELISA y suero PCR positivos se retiran inmediatamente, así como los que son ELISA(+)/PCR(-) o bien ELISA(-)/PCR(+). Antes de realizar las pruebas también se eliminan todos los verracos.

El estudio que está en marcha incluye 12 granjas de producción de EE.UU. Los inventarios de las reproductoras en las granjas del estudio oscilan entre las 200 y 1.500 cerdas. La aplicación del protocolo de diagnóstico ha dado lugar a la eliminación del 6 al 11% de las reproductoras; sin embargo, sólo una pequeña parte, de 2 a 4 / 800 fueron PCR positivas en el momento del muestreo. No se detectó reinfección a pesar de realizarse programas de vigilancia mensual en la población reproductora (tamaño de la muestra 95/5) y la de engorde (95/10) durante un período de hasta 10 a 24 meses después de finalizado el protocolo. Los costes del diagnóstico oscilaron entre 8 y 10 $ por cerda.

Las cerdas eliminadas fueron principalmente las más viejas (>6 partos) y parecen agruparse en grupos de 3 a 4 (focos de infección), o residir como entidades únicas distribuidas al azar por la población gestante. Los datos de la prueba ELISA dentro de los focos infectados tienden a una distribución normal, lo que sugiere que la transmisión del virus se inicia a partir de un único animal y sólo se produce en las distancias cortas.

En conclusión, aunque tales estrategias requieren todavía una evaluación más a fondo, se están llevando a cabo actualmente otros estudios para determinar los estímulos para el inicio de la difusión, la verdadera incidencia de cerdos con infección persistente y la evaluación de pruebas diagnósticas antes de la muerte para potenciar su detección.