Los eventos presenciales pueden causar impactos ambientales que han sido bien discutidos: aumentan la producción de residuos producidos por parte de los asistentes, patrocinadores y organizadores, generan contaminación atmosférica, acústica, lumínica y adicionalmente representan un elevado gasto de recursos como energía, agua y alimentos.
Un ejemplo muy práctico se da con los stands que típicamente su usan en eventos que contemplan una muestra comercial, el uso de estos significa gran desperdicio de materiales utilizados por la inadecuada disposición final y la poca preocupación en el diseño para promover la utilización de materiales amigables con el medio ambiente, o la dificultad para su reutilización (González y Osorio, 2010).
Para 333 Latinoamérica es muy importante que su primer congreso presencial se encuentre enfocado en mitigar su impacto ambiental e incluir en su desarrollo varias estrategias tendientes a cumplir con estándares para ser un evento sostenible, desde su organización y desarrollo minimizando la huella ambiental y dejando un beneficio a la comunidad involucrada; para esto estamos llevando a cabo varias acciones:
- La elección del recinto: el Centro de Convenciones Plaza Mayor promueve la generación de energía eléctrica con base en fuentes renovables como parte de su compromiso con la mitigación del cambio climático, cuenta con el sello Energía Verde EPM que respalda a las empresas que tienen como parte de su compromiso ambiental al promover la generación de energía eléctrica, gracias a la implementación de la energía verde que funciona por medio de fuentes 100 % renovables como el agua y el viento, certificado que fue emitido por The International REC Standard en 2019. Plaza Mayor puede reportar el consumo de energía con factor de emisión cero, en el inventario anual de Gases de Efecto Invernadero (GEI).
- Además, el lugar escogido esta ubicado en la ciudad de Medellín y se encuentra dentro del área certificada por el ICONTEC como Destino Turístico Sostenible, bajo la norma NTS TS 001-1 (2014); siendo la primera zona urbana de la ciudad certificada en esta norma y quinta en el país. Esta norma promueve la adopción de un enfoque que permita que la ciudad demuestre su gestión hacia el cumplimiento de requisitos asociados con la sostenibilidad ambiental, sociocultural y económica.
- Disrupción en la muestra comercial: una zona de stands para el tamaño de evento que estamos planificando produciría entre 20 y 40 toneladas de basura generada por su construcción y uso, en cambio, vamos a disponer de una zona de networking en donde los patrocinadores y asistentes podrán interactuar, de esta manera se usarán muebles y enceres alquilados que podrán ser reutilizados en otros eventos.
- Publicidad: toda la promoción del evento se ha realizado a través de correo electrónico, difusión en redes sociales y página web, no hemos entregado material impreso o que implique el uso de papel.
- Merchandising: todo el material que 333 entregará como organizador será generado a partir de materiales biodegradables, reciclados o con fibras naturales, adicionalmente estamos alentando a nuestros patrocinadores a minimizar la entrega de material promocional.
- Proveedores locales: estamos contratando emprendedores de la región para que nos suministren productos como el café y la cerveza que disfrutarán los participantes. Además, continuamos buscando que otros productos pueden ser abastecidos por pequeñas empresas o compañías con responsabilidad social.
- Disminución de uso de plástico de un solo uso: el uso de elementos necesarios para distribución de alimentos y bebidas está enfocado en el no uso de plástico sino más bien en elementos reciclables o reutilizables.
Finalmente, dentro de la planificación del evento seguimos explorando que otras medidas podemos implementar para promover la sostenibilidad ambiental, económica y social, siendo este un evento pionero en el sector porcino.