Efectos de la fitasa bacteriana (Citrobacter braakii) sobre el rendimiento y las características de la canal en cerdos de engorde

da Silva CA, Callegari MA, Dias CP, de Souza KL, de Carvalho RH, Alebrante L, da Silva Martins CC, Heck A, Fascina VB. Increasing Doses of Bacterial Phytase (Citrobacter braakii) Improves Performance and Carcass Characteristics of Pigs in Growing and Finishing Phases. Animals. 2022; 12(19): 2552. https://doi.org/10.3390/ani12192552

14-feb-2023 (hace 1 años 10 meses 8 días)

Las fitasas de origen bacteriano son enzimas exógenas ampliamente utilizadas en las dietas de animales monogástricos debido a su acción de hidrolizar el fitato, considerado un factor antinutricional en los alimentos de origen vegetal. Como resultado de la hidrólisis, se produce un aumento de la disponibilidad de fósforo, otros nutrientes y energía ligados al fitato en los alimentos. La eficacia de la fitasa varía en función de aspectos inherentes a su propia estructura y origen, la edad y el estado fisiológico del animal y la composición de la dieta. Por lo tanto, el objetivo de este estudio fue evaluar los efectos de dosis crecientes de fitasa bacteriana (Citrobacter braakii) sobre el rendimiento y las características de la canal de cerdos de engorde. Un total de 120 cerdos castrados (25,16 ± 2,80 kg de peso y 68 días de edad) se distribuyeron en cinco tratamientos: dieta control positivo con fósforo inorgánico (P) y caliza (Ca); dieta control negativo con reducciones de P (en un 0,13%) y Ca (en un 0,11%); y tres dietas control negativo suplementadas con 1500 (CN15), 3000 (CN30) y 4500 (CN45) unidades de fitasa (FYT)/kg.

Como resultado, la ganancia diaria de peso en la primera fase de crecimiento (68-91 días) fue mayor en los grupos control positivo, CN15 y CN30, en comparación con el control negativo (1,06, 1,06, 1,06 frente a 0,95, respectivamente). La ganancia diaria de peso en la segunda fase del acabado (141-156 días) fue mayor en los grupos CN15 (1,20 kg) y CN30 (1,14 kg) que en el grupo CN45 (0,94 kg). Los pesos finales (peso vivo 156) en el grupo CN15 (122,95 kg de peso vivo) fueron superiores a los de los grupos control negativo (116,47 kg de peso vivo) y CN45 (114,43 kg de peso vivo).

En conclusión, la suplementación con 1500 y 3000 unidades de fitasa (FYT)/kg de alimento en dietas a base de maíz y harina de soja con una reducción de fósforo inorgánico (0,13%) y calcio (0,11%) mejora la ganancia diaria de peso y el peso vivo de los animales en la fase de crecimiento, lo que repercute en el rendimiento en las fases de acabado y en el peso corporal al la faena. Este aporte podría resultar en una reducción del uso de fuentes de fósforo, mejorando aspectos medioambientales con un aumento de los principales parámetros zootécnicos.