Resumen de la Allen D. Leman Swine Conference: Producción (III)

Antonio Palomo Yagüe
29-dic-2022 (hace 1 años 10 meses 17 días)

Individual gilt birth weight, litter birth weight phenotype and effective gilt development programs. Jennifer Patterson, Universidad de Alberta, EEUU

El manejo de las futuras reproductoras desde el momento del nacimiento hasta el final de su selección es esencial para su longevidad. Un bajo peso al nacimiento (<1 kg) supone un alto riesgo de mortalidad en lactación y bajo crecimiento desde el nacimiento, con un menor nivel de retención hasta el final de su proceso de selección. El bajo peso al nacimiento es repetitivo, camada tras camada, por lo que debemos seleccionar los lechones hembra con mayor peso al nacimiento de dentro de nuestro núcleo de abuelas. Otro parámetro de selección final es la temprana respuesta al estímulo del macho (precocidad sexual), ligada a una mayor longevidad y productividad. El peso de las cerditas a la primera inseminación no debe ser muy elevado (>160 kg) ya que implica un grave riesgo de descarte por problemas locomotores, reproductivos y mortalidad. Es importante registrar el celo sobre los 200 días de vida para programar correctamente el momento de la inseminación. La correcta aclimatación de las cerdas y su estado metabólico positivo en el periodo previo a la inseminación determinan un buen primer tamaño de camada (16 días antes de la inseminación, deben ser ubicadas adecuadamente). Finalmente, el entrenamiento adecuado y la formación del personal de las cuarentenas e inseminación, así como su disposición temporal suficiente, son críticas, teniendo un efecto positivo en los parámetros productivos de la granja.

Gilt puberty, subsequent fertility and incidence of silent heat in response to boar exposure and hormone induction. Rob Knox, Universidad de Illinois, EEUU

El manejo de las cerdas de reposición se basa en conocer el momento y la expresión de la pubertad, detectando el celo en respuesta a la exposición al verraco, determinando la edad óptima y su estado de maduración. La variación en la expresion y el tiempo del primer estro está relacionada con su maduración corporal en el momento de la primera inseminación. Los fallos en la detección del celo son frecuentes, por lo que se considera importante conocer el peso al nacimiento y el crecimiento posterior. El desarrollo del aparato reproductor comienza en el periodo fetal y continua hasta la pubertad, por lo que cualquier alteración durante este tiempo provocará anomalias reproductivas. El celo es la clave que identifica la fertilidad de las cerdas de reposición, pero la capacidad de las personas para detectarlo se ve afectada por el ambiente y los métodos de detección. La inducción, expresión y detección del estro depende de la exposición de las cerdas a la estimulación visual, auditiva, táctil y olfativa a las feromonas del verraco. La expresión del estro depende de la maduración de los folículos grandes y de su producción de estrógenos, así como de la respuesta de su cerebro a las hormonas. El desarrollo folicular ocurre en respuesta a la liberación de gonadotropinas por la pituitaria. Las cerditas que no salen a celo durante los 50 días posteriores al contacto con el verraco suelen tener más fallos reproductivos y peor productividad, por lo cual es importante hacerles un estudio ecográfico, analizar los niveles de hormonas en sangre, estudiar los ovarios y aparato reproductor en planta de beneficio y generar informes históricos de fertilidad, a efectos de tener un correcto diagnóstico y análisis de costos, así como adaptar programas de manejo para corregirlo. En no pocas ocasiones, dichas cerdas problema tienen celos silentes, es decir han ovulado y no las hemos detectado, y otras cerdas muestran signos de celo pero no reflejo de inmovilidad. Por ello, es importante estudiar su estado fisiológico, para determinar su infertilidad y tomar las acciones oportunas.

Body condition loss of young sows during lactation: consequences for post-weaning reproductive processes and performance. Nicoline Soede, Universidad de Wageningen, Países Bajos

Durante el periodo de lactancia se determinan los parámetros reproductivos posteriores al destete (intervalo destete-celo, fertilidad y tamaño de camada al siguiente parto), así como la calidad de la siguiente camada en términos tanto de peso al nacimiento como de variación de pesos al nacimiento. Esto se debe tanto a la intensidad del amamantamiento como al balance energético durante la lactación, que crean diferencias en la liberación de hormonas gonadotrópicas LH y FSH, así como la hormona metabólica IGF-1 y sus metabolitos, que afectan al desarrollo folicular, tanto durante como después de la lactación. Las cerditas jóvenes son especialmente susceptibles a reducir sus parámetros reproductivos después de la lactación por su menor capacidad de consumo y mayor demanda para producción de leche, movilizando mayores reservas corporales. Las cerdas actuales, más magras y menos grasas, favorecen estos problemas de fertilidad postdestete en las jóvenes.

En una reciente tesis doctoral realizada en Holanda (Costermans, 2020) el racionamiento de alimento en las dos últimas semanas de lactación de 24 días (3,5 vs 6,5 kg/día) supone una mayor pérdida de peso, sobre todo de masa muscular, con una similar pérdida de grasa, teniendo unos niveles del factor de crecimiento de la insulina (IGF1) en plasma inferiores y mayores niveles de creatinina en la última semana de lactación. Los folículos ováricos de las restringidas eran más pequeños, con menores niveles de esteroides, siendo menos competentes, con un menor grado de acumulación del complejo cúmulo-ovocito (COC) durante la maduración in vitro, una menor tasa de fertilización in vitro y mayor grado de polispermia. Así, la pérdida de condición corporal durante la lactación impacta sobre el desarrollo folicular y la competencia de los ovocitos justo después del destete, teniendo un efecto en la fertilidad postdestete de las cerdas actuales, que son más magras y menos grasas.

Pósters

♦ Las estrategias que se están desarrollando para reducir la mortalidad en los lechones desde el nacimiento al sacrificio abarcan proyectos de investigación, educativos y prácticos a pie de granjas. La National Pork Board y la Foundation for Food and Agriculture Research, con un equipo interdisciplinario de las universidades de Iowa State, Kansas State y Purdue están llevando a cabo un proyecto de cinco años para identificar todos los factores que contribuyen a dicha mortalidad en granjas comerciales.

♦ El incremento de la producción lechera es vital en las cerdas actuales, siendo el desarrollo mamario uno de los pilares que la afectan, con tres periodos críticos bien diferenciados: desde los tres meses de edad a la pubertad, de 90 días de gestación hasta el parto y la lactancia.

♦ Los receptores estrogénicos en cerdas ibéricas a nivel uterino nos permiten valorar el desarrollo vascular y la implantación embrionaria entre los días 22 y 32 de gestación, como factores angiogénicos.

♦ Ciertos trabajos incluyendo probióticos en el alimento demuestran su efecto en la mejora de la respuesta immune, tanto local de macrófagos alveolares como sistémica (cepas de Bacillus spp). Otros trabajos lo relacionan con una reducción en la incidencia de colibacilosis en lechones destetados.

♦ La inclusión de extractos vegetales que contienen compuestos fenólicos incluidos en alimentos de cerdos de engorde demuestra mejoras en el peso de las canales, con variaciones en el resto de parámetros zootécnicos.

♦ La inclusión de cloruro de cobre tribásico frente a otras fuentes de cobre en lechones mejora la ganancia media diaria y la salud intestinal de los lechones destetados.

♦ La adición de mezclas de aceites esenciales en el agua de bebida a lechones destetados tiene efectos positivos sobre la incidencia de trastornos digestivos causados por Escherichia coli y rotavirus, que pueden llegar a producir mortalidades de hasta el 20-30% en lechones destetados.

♦ En una prueba experimental se infectaron, con una cepa de Escherichia coli F18 ETEC, lechones destetados de 21 días a los que se les suministro alimentos que incluían proteína de plasma porcino tratada con rayos ultravioleta. La supervivencia de los lechones fue mayor, con menor excreción de bacteria en heces y mayor crecimiento que los lechones control sin dicha materia prima.

♦ El uso de rehidratantes y soluciones para mejorar el estado inmunitario de los lechones destetados reduce la mortalidad y mejora la ganancia media diaria.

♦ La incorporación de aceite de linaza como aporte de energía y de alfalfa como aporte de fibra en dietas de verracos mejora tanto la motilidad lineal como el volumen de eyaculado. Otro estudio demuestra el efecto positivo de incluir aceite de pescado (70 g/día) en la mayor producción espermática, que da lugar a poder producir 2,1 dosis más por eyaculado de 7400 millones de espermatozoides.

♦ Un estudio brasileño evalúa incorporar verracos de 24 frente a 34 semanas a la hora de utilizar sus extracciones para inseminar por primera vez, comparando machos terminales frente a línea maternal, encontrando diferencias en cuanto a su validación y resultados genéticos.

♦ Se presenta un trabajo sobre la automatización de los centros de inseminación mediante el uso de inteligencia artificial, con un software que se incorpora desde la preparación de las dosis seminales, reduciendo errores humanos, permite la trazabilidad del producto y analiza todos los procesos desde el CIA a la granja, mejorando la eficiencia reproductiva.

♦ En un estudio de Kansas State University sobre la tasa de llenado de las naves de lechones destetados, concluyen que la ganancia media diaria y el peso a la salida es superior si hay menos entradas de lechones en la misma sala, estimando diferencias que pueden estar entre 1-1,5 kg entre una y cuatro entradas.

♦ En un estudio realizado por la Ohio State University sobre la mortalidad de los lechones en la fase posterior al destete, encuentran una relación directa con la menor edad al destete e indirecta con el mayor peso al destete.

♦ En otro estudio realizado por la universidad de Minnesota sobre la mortalidad de cerdas reproductoras durante un periodo de nueve años (2009-18) en granjas comerciales en el medio oeste americano con 357 425 cerdas, obtuvieron una mortalidad mensual entre 1,79-3,29 de todas las granjas. Las muertes se concentran al final de la gestación y durante la lactación, con una media de ciclos por baja de 2 y mayor incidencia en cerdas jóvenes en el periparto. Encuentran una mayor incidencia en los meses de primavera y verano frente a invierno, con una relación 1,27-1,37 a 1 y picos de mortalidad en las semanas de más calor. En otro estudio realizado en la universidad estatal de Iowa apuntan que el aumento de prolapsos uterinos en cerdas tiene un componente hereditario moderado a lo largo de los diferentes partos de las cerdas.

♦ En un estudio realizado en Brasil sobre la incidencia de trastornos locomotores en cerdas reproductoras lactantes, concluyen que tiene una clara estacionalidad, con más cerdas problema en invierno y primavera, con menor grado de lesiones podales en verano. El uso de minerales en forma orgánica puede ayudar a paliar dicha incidencia.

♦ Diversos estudios demuestran la importancia de monitorizar de forma continua y a tiempo real la incidencia de toses en cerdos de engorde y lechones (Tecnología SoundTalks) para identificar de forma prematura los signos respiratorios de trastornos respiratorios – estado de salud respiratoria, llegando a adelantarse en varios días (4,8) a los resultados positivos frente a Mycoplasma hyopnemoniae, gripe y PRRS a su diagnóstico mediante fluidos orales, lo que tiene un impacto económico positivo al adelantar al tratamiento.

♦ La aplicación 24 horas antes de la castración quirúrgica a lechones de flunixin meglumine transdérmico a 3,33 mg/kg es eficaz en la reducción del dolor según la escala de dolor UPAPS-Botucatu.

Antonio Palomo Yagüe