Perspectivas favorables para los mercados mundiales de cereales

Jueves, 3 de mayo de 2018/ FAO.
http://www.fao.org

07-may-2018 (hace 6 años 7 meses 15 días)

Se espera que la producción mundial de cereales en 2018 baje hasta los 2 607 millones de toneladas, alrededor de un 1,6 por ciento menos que la cosecha cercana al récord de 2017.

La disminución se debe principalmente a una contracción prevista en la producción de maíz, en especial en los Estados Unidos. El descenso de la producción de trigo obedece en gran parte a una reducción esperada en la Federación de Rusia, tras el resultado excepcional de un año atrás. Mientras tanto, la FAO pronostica en forma tentativa un aumento del 1,3 por ciento en la producción mundial de arroz, para llegar a 510,6 millones de toneladas, estableciendo un nuevo récord, gracias sobre todo a la expansión de los cultivos en Asia.

En cuanto a la utilización de cereales -tanto para alimentos como para piensos-, las nuevas previsiones de la FAO apuntan también a un máximo histórico de 2 626 millones de toneladas. Esto refleja un aumento proyectado del 1,0 por ciento en la utilización mundial de arroz, del 0,8 por ciento en la de trigo y del 0,4 por ciento en los cereales secundarios. Entre estos últimos se espera que el consumo de maíz aumente hasta en un 2,8 por ciento, marcando un nuevo récord con 615 millones de toneladas. El mayor incremento interanual en la utilización de maíz para piensos se prevé en China y América del Sur.

Como resultado, la FAO espera que las existencias mundiales de cereales al final de las temporadas que terminan en 2019 disminuyan en un 2,7 por ciento y que el coeficiente entre las existencias mundiales de cereales y la utilización baje al 27,2 por ciento, por debajo del nivel máximo en 16 años del 28,8 por ciento alcanzado en 2017/18, pero muy por encima del mínimo histórico del 20, 4 por ciento registrado en 2007/08.

El primer pronóstico de la FAO sobre el comercio internacional de cereales para el año en curso se cifra en 406 millones de toneladas, lo que implica un ligero descenso del 0,6 por ciento en comparación con el máximo histórico previsto para la temporada actual.