Efectos de diferentes periodos de retirada de dietas altas en fibra sobre las canales porcinas

Coble, K. F., DeRouchey, J. M., Tokach, M. D., Dritz, S. S., Goodband, R. D., and Woodworth, J. C. (2018). Effects of withdrawing high-fiber ingredients before marketing on finishing pig growth performance, carcass characteristics, and intestinal weights. Journal of Animal Science, 96(1), 168-180. https://doi.org/10.1093/jas/skx048

17-may-2018 (hace 6 años 6 meses 7 días)

Si bien podemos obtener ventajas económicas al usar en piensos subproductos cuando estos son rentables, el uso de elevadas cantidades de fibra dietética en la fase de acabado puede afectar negativamente el rendimiento de la canal. Se realizaron dos experimentos para determinar el momento de finalizar el uso de un alto contenido de fibra en la dieta de cerdos antes del sacrificio que permita restaurar el rendimiento de la canal y el valor de yodo de la grasa (IV) a valores similares a los de los cerdos alimentados de forma continua con una dieta a base de harina de maíz y soja.

En el experimento 1 se usaron 288 cerdos (38,4 ± 0,3 kg peso corporal inicial) en un estudio de 88 días que fueron alimentados con una dieta de maíz y harina de soja baja en fibra del día 0 al 88 o una dieta con alto contenido en fibra (30% de DDGS y 19% de harinilla de trigo) hasta los días 20, 15, 10, 5 o 0 días antes del sacrificio, volviendo luego a la dieta de maíz y harina de soja baja en fibra. Las dietas no fueron equilibradas para contenido de energía neta. Los cerdos alimentados de forma continuada con la dieta alta en fibra tendieron a aumentar el consumo medio diario de pienso y disminuyeron la relación ganancia:ingesta (G:I) y el rendimiento de la canal en comparación con los cerdos alimentados con la dieta baja en fibra. Además, los cerdos alimentados con la dieta alta en fibra tuvieron mayor IV en la grasa de papada, grasa dorsal, abdominal y cuello en comparación con los alimentados con la dieta baja en fibra. A medida que aumentaban los días de retirada de la dieta alta en fibra, los cerdos que anteriormente se alimentaban con la dieta rica en fibra tenían un aumento cuadrático del rendimiento de la canal. Los cerdos alimentados continuamente con la dieta alta en fibra tenían un intestino grueso más pesado (porcentaje de peso de canal caliente) que los cerdos alimentados con la dieta de harina de maíz y soja. Aumentando el tiempo de retirada, el peso del intestino grueso completo aumentó linealmente y el IV de la grasa abdominal tendió a mejorar. En el experimento 2 se utilizaron un total de 1.089 cerdos (44,5 ± 0,1 kg de peso corporal inicial) en un estudio de 96 días de duración con los mismos tratamientos dietéticos que en el experimento 1 con una excepción, los cerdos fueron alimentados con la dieta alta en fibra hasta el día 24, 19, 14, 9 o 0 antes del sacrificio y luego pasaron a la dieta de harina de maíz y soja. Los resultados indicaron que los cerdos alimentados de forma constante con la dieta con alto contenido de fibra presentaron menor ganancia media diaria de peso y G:F en comparación con aquellos alimentados con la dieta baja en fibra de maíz y harina de soja. El uso de una dieta alta en fibra y posterior cambio a una dieta de maíz y harina de soja baja en fibra tendió a mejorar de forma lineal la G:I al aumentar el período de retirada. Los cerdos alimentados con la dieta rica en fibra redujeron el porcentaje de peso de la canal caliente en comparación con los alimentados con la dieta baja en fibra de maíz y harina de soja que tendía a aumentar cuadráticamente a medida que aumentaba el período de retirada.

En conclusión, cambiar de una dieta alta en fibra a una dieta de harina de maíz y soja baja en fibra hasta 24 días antes de alcanzar el peso de sacrificio aumentó el rendimiento de la canal (experimento 1) o porcentaje de peso de la canal (experimento 2) con la mejora más destacada durante los primeros 5 a 9 días después de la retirada de la dieta alta en fibra. Aunque reducir la fibra puede mejorar el IV de la grasa, ninguna de las estrategias de retirada permitió restaurar este índice a niveles similares al de los cerdos alimentados con dietas bajas en fibra.