Consumo de pienso en cerdas lactantes

Así lo ve Imasde

31-oct-2006 (hace 18 años 1 meses 21 días)
Introducción

Aunque sólo representa una tercera parte del consumo de alimento de una cerda, está ampliamente aceptada la gran importancia de la alimentación durante la lactación sobre los parámetros productivos y reproductivos de la cerda y su camada.

Así mismo, la selección genética ha evolucionado a animales que producen más lechones y leche (mayores necesidades), de mayor tamaño (mayores necesidades de conservación), más magros (menores reservas) y con menores consumos, siendo por tanto más crítica la alimentación durante la lactación.

Requerimientos nutricionales

Las recomendaciones estándares para un pienso de lactación podrían ser:

EM, kcal/kg 3.150-3.200 Proteína ideal
EN, kcal/kg 2.250-2300 Metionina 30% Isoleucina 62%
Lisina total, % 0,90-1,00 Met+Cis 56% Valina 76%
Lisina DIV1, % 0,80-0,90 Treonina 65%
Lisina DIA2, % 0,75-0,80 Triptófano 18%
1 DIV: lisina verdadera estandarizada digestible en íleon
2
DIA: lisina aparente digestible en íleon.
Adaptado de Normas FEDNA. Necesidades Nutricionales para Ganado Porcino (2006)


Estas recomendaciones consideran un consumo medio diario de unos 4,5-5,0 kg y una camada al destete de 10 lechones con un peso de 5,5-6,0 kg a los 21 días. Por cada lechón adicional en la camada el consumo de pienso de la cerda debería incrementarse en 0,4-0,5 kg/d. Además, por cada 1 kg de pienso de incremento del consumo medio diario en lactación representa un incremento de 1 kg de peso medio de los lechones al destete.

En condiciones de verano puede ser recomendable incrementar el contenido energético del pienso un 1-2%, así como la ratio de aminoácidos respecto a la energía hasta un 10%. También hay que aumentar proporcionalmente la concentración de los demás nutrientes.

Aditivos

Actualmente en el mercado existen una gran variedad de aditivos disponibles para los piensos de lactación. Estos pueden orientarse a distintos fines:

• Mejorar la salud intestinal y digestión de la cerda, con efectos beneficiosos sobre la salud de los lechones, producción de leche y balance nutricional de la cerda.

• Vitaminas, microminerales (orgánicos vs inorgánicos) y nutrientes esenciales, que pueden mejorar el metabolismos y/o inmunidad de la cerda, su transferencia al feto, calostro o leche. Sus efectos beneficiosos pueden ser mejoras productivas a lo largo de la vida de la cerda, con incremento del número, peso y vitalidad de los lechones destetados.

• Otros aditivos, ingredientes o formas de presentación del pienso que puedan mejorar su palatabilidad y/o digestibilidad.


Manejo

Aunque es el último punto tratado, debe considerarse el de mayor importancia.

• No sobrealimentar las cerdas durante los dos primeros tercios de gestación, pudiendo incrementar el plano de alimentación las 2-4 últimas semanas para conseguir un mayor peso de la camada. Asimismo, dietas fibrosas en gestación aumentarán la capacidad de ingestión durante la lactación.

• Suministrar el pienso a voluntad o varias veces al día en las horas más frescas, limpiando los restos de pienso de los comederos de restos de pienso. Los primeros días post parto puede restringirse el pienso alcanxando el consumo máximo en 5-7 días. El pienso húmedo estimula el consumo, pero puede dificultar el manejo.

• Procurar un buen acceso al agua, de calidad y en cantidad.

• Mantener la temperatura ambiente próxima a 18-20ºC y utilizar sistemas de refrigeración en épocas calurosas. Por cada 5-10ºC de exceso (25-30ºC ambientales), puede reducirse el consumo voluntario de pienso en unos 0,5-1,0 kg.

• Excepcionalmente, pueden utilizarse suplementos nutritivos, siendo más indicados para animales de 1º y 2º ciclo y épocas de calor.

Conclusiones

• No sobrealimentar a las cerdas durantes los dos primeros tercios de gestación.

• Mantener la temperatura ambiente próxima a la termoneutralidad (18-20 ºC) o aplicar medidas de refrigeración.

• Suministrar el alimento a voluntad o varias veces al día en las horas frescas, procurando que el comedero esté limpio y que se disponga de un flujo de agua abundante de calidad.

• Procurar un consumo medio diario 4,5-5,0 kg.


Por tanto, es clave el manejo por parte del ganadero, y en especial el de la alimentación, pudiendo ayudar ciertas medidas nutricionales como dietas más nutritivas y apetecibles, así como posiblemente ciertos aditivos.