La situación
Es muy frecuente ver cómo, en verano (con temperaturas mayores de 25 grados), los cerdos dominantes se tumban en los cebos al lado de los bebederos buscando refrescarse. Este comportamiento hace que los últimos animales de la jerarquía no tengan acceso al agua con la suficiente asiduidad.
Estas situaciones provocan una bajada del consumo de agua y, como consecuencia, de consumo de alimento en los animales más débiles.
Esto va a provocar un estrés muy importante en el grupo, una falta de crecimiento y una menor homogeneidad del grupo, con las consecuencias económicas que esto conlleva.
La solución
Si colocamos una tubería a lo largo de toda la nave que proporcione un goteo lejos de donde están los bebederos, veremos que los animales dominantes se tumbarán donde el suelo esté mojado (debajo del goteo). Esto dejará libre la zona del bebedero, facilitando el acceso de los animales más flojos.
Para ello perforamos la tubería, añadimos unos difusores de riego por goteo y colocamos un reloj temporizador de jardinería (los hay en el mercado por menos de 30 euros) para que sólo se ponga en funcionamiento durante las horas de más calor, utilizándose de forma discontinua y con baja presión en la tubería, evitando así el gasto excesivo de agua.
La tubería debe limpiarse de vez de cuando para evitar el acúmulo de cal en los difusores y su posible taponamiento.
Nosotros hemos observado una mejora importante en el crecimiento y una mayor homogeneidad con respecto a las explotaciones en las que no aplicamos este sistema.
Os aseguro que el truco funciona.