Reproductoras Topigs Norsvin: puntos clave de manejo

Sánchez-Osorio nos cuenta qué puntos de manejo son imprescindibles para conseguir un buen aprovechamiento del potencial de la TN70.

En primer lugar, cuenta que aparte de los extensos manuales de manejo y nutrición disponen de una versión más reducida en forma de consejos o datos prácticos (tips). Y además de forma más reciente una App para cualquier móvil, con los consejos básicos de manejo y alimentación de la TN70.

Sánchez-Osorio resalta que la selección de las futuras reproductoras comienza incluso antes de su nacimiento. Es importante que la condición corporal de la madre al destete sea buena pues esto va a condicionar la salida en celo en el siguiente ciclo, la calidad de los ovocitos y de los embriones, con el consiguiente impacto en la calidad del lechón nacido.

Recría

También incide en la importancia de la fase de crecimiento de la futura reproductora. Si bien esta fase depende cada vez menos de la empresa proveedora de genética pues muchos clientes trabajan con modelos de “autoreposición”, es importante que estos sigan las recomendaciones de Topigs Norsvin en la alimentación de las futuras reproductoras.

Es imprescindible una buena selección de las lechonas desde el nacimiento. Solo lechonas vitales, con buen peso al nacimiento y al menos 14 tetinas (en el caso de las TN70 este objetivo ya puede ser de 16), deberían ser identificadas como posibles futuras reproductoras.

Las cerdas de reemplazo TN70 se desarrollan y crecen rápido, son magras y tienen buen apetito. Las curvas de peso recomendadas y las estrategias de alimentación lo tienen en cuenta y evitan un crecimiento demasiado rápido en la fase juvenil (25 a 55 kg). Recomendamos que la alimentación sea controlada, pero ad libitum, durante toda la recría mediante la reducción de la energía en la dieta y alimentación en 3 fases. Las dos primeras fases (25-55 Kg y 55-100Kg) persiguen garantizar un desarrollo corporal y esquelético adecuado, en la tercera fase perseguimos preparar a la cerdita para su primera gestación. Cuando no hay opción de proporcionar tres fases, nuestros nutricionistas pueden recomendar soluciones intermedias que se adapten a las condiciones de cada granja.

Peso a la primera cubrición

El objetivo de peso a la cubrición es de 150-160 kg, alrededor de los 240 días (220-240). Pero insiste en la importancia de la relación edad/peso que no será igual en todas las condiciones. El objetivo debería ser alcanzar un crecimiento de 650g/d desde el nacimiento a la cubrición. La edad a la primera cubrición debería estar supeditada a alcanzar el peso mínimo mencionado y asegurar que al menos sea el segundo o tercer celo.

Sánchez-Osorio añade que no sería suficiente conocer el peso a la primera cubrición, sino que idealmente debería monitorizarse el peso al primer parto y al primer destete pues el desarrollo de la cerda durante este primer ciclo tiene un impacto directo en la longevidad de la cerda.

Manejo a la primera cubrición

Se recomienda que la exposición al verraco comience con 5-6 meses. Se ha observado que esta exposición temprana favorece un mayor desarrollo uterino y mejor desempeño durante toda su vida reproductiva.

Respecto a la cubrición, sin diferencias importantes respecto a otras híbridas: Cubrición al segundo o tercer celo, la cerda TN70 destaca por presentar buena manifestación del celo.

La adaptación a jaula debería realizarse durante un mínimo de 15 días, y también es recomendable realizar una alimentación específica de flushing durante 15 días previos y si no es posible tener dieta específica, al menos dar un aporte extra de dextrosa y garantizar una ingesta alta de alimento en esta fase.

Curva de alimentación

En la gestación es fundamental lograr que la cerda continúe su desarrollo corporal natural además de soportar el desarrollo de la gestación. Sánchez-Osorio nos cuenta que si es posible deberían utilizarse 2 alimentos diferentes en gestación, uno para inicio y medio de la gestación y otro final. El alimento de la primera fase de gestación tiene por objetivo recuperar la condición corporal. El alimento de la segunda fase, favorecer desarrollo de los fetos para mejorar peso a nacimiento. Si se complicase la implementación de las dos dietas se puede utilizar solo una dieta de gestación, pero tiene que ser equilibrada para que estimule el aumento de peso por gestación en las hembras más jóvenes y, al mismo tiempo, controlar el peso corporal de las hembras de mayor número de partos.

En las cerdas destetadas, al comienzo de la gestación, las necesidades nutricionales son mayores y de nuevo, al final de gestación, cuando se produce el mayor crecimiento de los fetos y el desarrollo mamario. En las primerizas, las necesidades siguen una curva ascendente durante toda la gestación para soportar el desarrollo corporal de la cerda (tabla 1).

Tabla 1. Evolución de las necesidades de lisina y energía durante la gestación según el número de ciclo.

Ya en maternidad, lo ideal sería un alimento de periparto desde la entrada en maternidad hasta el segundo o tercer día post parto. La ventaja de una dieta de transición es que se puede incrementar la cantidad de alimento antes del parto sin que esto tenga ningún efecto negativo en el desarrollo de la ubre y el comienzo de la producción de leche, previniendo el estreñimiento y manteniéndolas calmadas. Otro aspecto a vigilar es que haya continuidad de la composición de la dieta de gestación y la de lactancia.

En lactancia, las pérdidas de condición corporal deberían ser menores que el 10 % del peso corporal. Tras el parto se opta por una subida gradual, lenta. Se quiere evitar que por querer aumentar demasiado rápido se sobrealimente a la cerda y se consiga el efecto contrario. La prioridad es que a partir del 8º-9º día el consumo sea el máximo que demande la cerda.

Tabla 2. Curvas de alimentación recomendadas con alimentos de lactancia que sigan las recomendaciones nutricionales de Topigs Norsvin.

Manejo en maternidad

Sánchez-Osorio nos remite al artículo previo sobre los criterios de selección de la TN70. Como nos contaba allí, en Topigs Norsvin se ha buscado que cualquier aumento en nacidos totales se acompañe de un aumento de nacidos vivos, y de un aumento en número de tetas. Según él, esto explica que la TN70 no requiera de manejo muy específicos de asistencia al parto o de adopciones, pues una cerda de buen manejo y alta capacidad lechera.

En granjas en buenas condiciones el objetivo de producción debe situarse entre 15-16 nacidos vivos, y 13-14 destetados por cerda.

Es una cerda que puede trabajarse con lactaciones entre 21 y 28 días y obtenerse pesos de destete cercanos o superiores a los 7 kilos a los 28 días de edad.