Principales problemas con las cerdas gestantes en grupos (II)

En el primer artículo se explicaban algunos de los principales problemas encontrados en gestaciones en grupos. En este artículo se proponen algunas soluciones.

La primera recomendación es evaluar los parámetros antes y después del cambio en las gestantes en grupo para lo cual sería conveniente comparar un mismo periodo de un año antes de realizar la adaptación a bienestar.

Datos reales de una granja adaptada en el verano de 2012

Una vez realizado este ejercicio seremos más conscientes de las consecuencias de los cambios realizados para adaptar nuestra granja, viendo exactamente qué parámetros han empeorado y en qué proporción.

Aunque un cambio normalmente requiere un proceso de adaptación y en ese proceso se suele perder algo de eficiencia, muchas granjas no han empeorado e incluso han mejorado sus productividades; por lo tanto, si detectamos una caída, no podemos aceptarla como normal.

La siguiente recomendación es buscar ayuda externa de expertos tanto en diseño como en manejo para elaborar un plan de acción para mejorar. Es impresionante el coste que ha tenido y sigue teniendo la adaptación a gestantes en grupo por no haber usado el conocimiento de asesores externos.

Algunos de los problemas que se encuentran frecuentemente y las soluciones propuestas se enumeran a continuación:

1. Competitividad:

• Hay que elegir el mejor momento del día para mezclar a los animales.
• Aumentar la ingesta durante la primera semana después de mezclar las cerdas.
• Hacer suficientes grupos para separarlas por tamaños.
• Darles acceso a material manipulable, por ejemplo paja, sin llegar a una cantidad que atasque las fosas.

Foto 1. Material manipulable en el corral.

2. Problemas de diseño. Los que se suele ver con más frecuencia son:

• No se separan correctamente la zona sucia y la zona de alimentación que es la zona donde se producen más peleas, haciéndolas aún más peligrosas.
• Zona de descanso en zonas de paso;
• Falta de aislamiento, teniendo las naves frías en invierno.

En todos estos casos, el diagnóstico suele ser claro una vez se observan los animales, entonces se deben hacer correcciones en el diseño, aunque requerirá de inversión.

3. Deficiente control de la condición corporal:

En la mayoría de los sistemas a partir del día 28 de gestación es imposible individualizar la ingesta de las cerdas, quedando sólo la lactación y el control de gestación como los periodos en los que esta ingesta se puede controlar.

• Alimentación durante la lactación: Es muy difícil que una granja de madres tenga una producción óptima sin una alimentación adecuada durante esta fase, y en gestaciones en grupo este momento es aún más importante. Habría que distinguir al menos entre cerdas normales, delgadas y flacas. Las cerdas flacas y normales deberían comer lo máximo posible, bien sea haciendo simplemente una curva a la cerda o haciendo una curva que considere cerda y número de lechones. A las cerdas gordas habría que obligarlas a perder algo de condición corporal ya que muchas veces se mantienen e incluso engordan al no producir mucha leche.
• Alimentación Gestación Control: (destete-28 días post cubrición) El objetivo durante este periodo es que las cerdas lleguen con la mayor homogeneidad posible a la gestación confirmada. Es interesante ordenar a las cerdas por condición corporal a la hora de destetarlas, para facilitar la alimentación según la condición corporal.
• Gestación confirmada: El objetivo durante este periodo es que las cerdas lleguen en óptima condición al parto, las cerdas normales deberían mantenerse, habría que seguir recuperándo a las cerdas flacas y podemos hacer que las cerdas gordas pierdan algo de condición, aunque con prudencia.

Debemos clasificar a las cerdas por tamaños y condición corporal:

• Lo ideal sería poder dividir a cada lote en 7 grupos
  • 1 grupo de nulíparas
  • 3 grupos de cerdas pequeñas: normales, delgadas y gordas
  • 3 grupos de cerdas grandes: normales, delgadas y gordas

• Lo mínimo es tener 4 grupos
  • 1 grupo de nulíparas
  • 1 grupo de cerdas pequeñas
  • 2 grupos de cerdas grandes: las más gordas y las más flacas.

Cada uno de estos grupos requiere de una curva de alimentación específica, adecuada a las diferentes necesidades que tendrán.

Por muy bien que lo hagamos en la mayoría de los sistemas se nos desigualarán las cerdas. Habría que tener un sitio preparado para separarlas del grupo y alimentarlas con arreglo a sus necesidades.

Independientemente del tipo de curva que elijamos para alimentar a las cerdas, es importante establecer unos puntos de control que nos hagan tomar consciencia de las consecuencias en los animales según las curvas elegidas.

Todas las semanas habrá que tener un día asignado para controlar la condición corporal y hacer las correcciones necesarias en las siguientes fases productivas:

• Post- inseminación.
• Al llegar a la gestación confirmada.
• La semana 8 de gestación.
• 3 semanas antes del parto.
• Al parto.

Durante esos tres periodos (lactación, gestación control y gestación confirmada) y sus subperiodos, se pueden usar diferentes estrategias que podrían dar pie a otra serie de artículos, en este, me he centrado en la condición corporal de las cerdas cuyo control es uno de los mayores retos en gestantes en grupos.